Cincuenta años después del magnicidio más difundido de todos los tiempos, perpetrado a plena luz del día, filmado en directo y visto en televisión por millones de personas de todo el mundo, asombra que aún no haya una explicación satisfactoria para el caso.
Ante la vista del mundo: El presidente John F. Kennedy, de 44 años, segundos antes de ser asesinado, recorre Dallas el 23 de noviembre de 1963 junto a su mujer Jacqueline y el gobernador de Texas.
Los hechos son conocidos: el 22 de noviembre de 1963, a las doce y media del mediodía, John Fitzgerald Kennedy, el presidente más joven y glamuroso de la historia de los Estados Unidos, fue acribillado a tiros mientras recorría en una limusina descapotable la ciudad de Dallas, Texas. Al lado, su esposa Jacqueline, con el traje rosa manchado de sangre, asistía impotente a la agonía de su marido. Unas horas más tarde, Lee Harvey Oswald, un ex marine marxista, era detenido en un cine próximo como autor de los disparos.
Ante el estupor del país, dos días después, mientras era conducido a la prisión del condado, en presencia de los policías que lo custodiaban y de las cámaras de televisión, Oswald fue asesinado por el propietario de un club nocturno llamado Jack Ruby, quien dijo actuar por su cuenta (también sería asesinado años más tarde). Estos sucesos, junto a la filmación de un aficionado el día del magnicidio en Dallas, que apuntaba que los disparos venían de trayectorias diferentes, movieron al gobierno a crear una comisión dirigida por el presidente del Supremo Earl Warren para investigar el caso.
El Informe Warren no convenció a nadie
En otoño de 1964, se hizo público el Informe Warren, cuyas principales conclusiones fueron que Oswald, “actuando en solitario”, realizó los disparos que mataron al presidente y que no había evidencias de que ni él ni Ruby tomaran parte en conspiración alguna, nacional o extranjera, para asesinarle.
Pero esta teoría no convenció a nadie. La desaparición de pruebas y testigos y la certeza de que Kennedy contaba con enemigos hostiles (la URSS, Cuba y, dentro del país, la ultraderecha, la mafia y la propia CIA) aumentaron la sospecha de que había sido víctima de un complot. En 1979, un comité parlamentario, tras reexaminar las pruebas, concluyó que seguramente hubo dos francotiradores, de frente y por detrás, como decían los testigos, y que, por tanto, era posible la existencia de una conspiración. Pero, ¿quien la organizó? El caso JFK sigue abierto.
El cortejo fúnebre en Washington, encabezado por la viuda, sus hijos Caroline y John-John, y los hermanos de JFK, Robert y Ted, entre otros.
En ninguna foto aparece el conductor… rarísimo, pues siempre aparece el maletero y todas las fotos se recortan a la altura del copiloto, que supongo sería un escolta. En el video, el conductor se vuelve una primera vez, y ve a JFK tras el primer disparo por la espalda desde larga distancia, en brazos de su esposa. Vuelve a mirar para adelante, y se vuelve otra vez, y vuela la tapa de los sesos de JFK a quemarropa (se aprecia como salen despedidos los sesos). El primer disparo fue del cabeza de turco Oswald, fue desde atrás del coche y por eso empujo el cuerpo de JFK hacia delante del asiento. El segundo disparo fue del conductor-escolta, con pistola o revolver, de abajo arriba y a bocajarro, en dirección contraria al avance del coche y al disparo de Oswald, por lo que el cuerpo en lugar de salir hacia delante como en el primero, se quedó pegado al asiento, hacia donde le empujo la bala. Al ver la esposa “el asunto”, intentó huir gateando por el maletero para alejarse del conductor. Es pura física, si te disparan de frente, te vas hacia atrás. Si te disparan por la espalda, te vas hacia delante.
Esto demuestra, que fue una conspiración desde el sistema. ¿Quién puede comprar tantas bocas? ¿Quién puede comprar al sistema? Solo la Elite Talmúdico Usurera Anglosionista, que impone el viejo Nuevo Orden Anticristiano vía Protocolos.
Donde hay un drama inexplicable que supone un punto de inflexión importante, ahí detrás están siempre. Me estaba acordando de Carrero… Siempre hay una cabeza de turco útil: Oswald, ETA, islamistas, etc etc etc.