Esta creación pertenece a lo que se denomina como «Land Art» (arte de la tierra) o «Earthwork» (creación de tierra), una moda de la década de los años 60 que buscaba mezclar arte con el ingenio de la naturaleza. Estas producciones eran concebidas para ser expuestas en el exterior, fuera de un museo o galería, como una forma de arte ecológico.
Una particularidad de estas obras, es que suelen perdurar poco tiempo debido a la erosión y las inclemencias meteorológicas naturales de la intemperie. Por eso esta espiral Jetty puede considerarse una de las obras de “Land Art” más longevas.
La espiral Jetty fue construida en 1970 por Robert Smithson (1938-1973) en la playa del Gran Lago Salado en Utah, Estados Unidos. Para ello alquiló durante 20 años un terreno de 200 metros cuadrados y fue financiado por Virginia Dwan.
Para su elaboración se marcó sobre el terreno la forma de espiral con estacas y luego se depositaron 5.000 toneladas de bloques de basalto y tierra de los alrededores del lago, formándose un camino en forma concéntrica. Se emplearon potentes máquinas para poder mover las piedras.
El paso del tiempo y el agua que la cubrió posteriormente al cabo de dos años, embellecieron si cabe mucho más esta obra dotándole de una perennidad más evidente.
Cuando el agua del lago se retiró a principios del nuevo siglo, mostró el trabajo que la naturaleza había ido haciendo con los años. Debido a las altas concentraciones de partículas minerales, éstas fueron adhiriéndose al camino formando una escollera de cristales de sal blancos que destacan sobre el fondo púrpura.
Que bonito, mira que la naturaleza nos deja imagenes increíbles!!
Desde luego que bonito es