Hoy Morbo retransmite un suceso que no debería ocurrir en ningún sector intergaláctico, y es el hecho de que no se acepten las normas de dicha zona o país y se desprecie a otros seres por su sexo.
Este vídeo y noticia es antigua, tiene ya 6 años aproximadamente. En el programa televisivo de Pauw & Witteman podéis ver la entrevista que se hizo al imán de la ciudad de Tilburg, en Holanda, el cuál es el responsable de la mezquita que hay en esa ciudad. Su nombre es Ahmed Salam. En la entrevista veréis que el único que habla holandés es el hijo, que hace de traductor.
Este hombre, aparte de vivir 15 años en Holanda y no saber ni papa de holandés, sigue hablando árabe y ha hecho un llamamiento a sus seguidores para que dañen el estado holandés evadiendo impuestos.
También ha estudiado un curso de integración financiado de los impuestos holandeses y cobra una pensión por enfermedad del estado holandés… ¿cómo se come esto?
Jeje, como me aprovecho de estos gilipollas holandeses mientras no pago un euro.
Para más inri, se hizo famoso el 19 de noviembre de 2004 por no estrechar la mano a la ministra de integración holandesa, Rita Verdonk, por motivos religiosos, ya que no iba cubierta con un trapo con el que ocultar su trémula carne.
¡Nooorrr! ¡Yo no dar mano a mujer lasciva como tú! ¡Taparte primero!
No sólo esto, sino que otro imán de la ciudad de Zoetermeer, también le negó el mismo apretón de manos a Rita Verdonk por ser mujer e ir destapada. En las fotos, podemos ver como Rita va casi en pelota picada, ¡ay que ver como le gusta a esta mujer enseñar la chicha!
¿Soy igual que tú?
Con todos mis respetos, no puedo dar la mano a una mujer.
Nuestro profeta no lo hizo tampoco y dijo que los hombres no pueden dar la mano a todas las mujeres.
Antes moriría que hacerlo.
Sólo cuando bajen un nuevo Corán.
Diversos chistes hechos a raíz del suceso sobre el rechazo de dar la mano a Rita Verdonk.
En este programa de televisión que os he indicado (Pauw & Witteman), Ahmed se negó a sentarse en la mesa de debate ya que había un vaso de vino en la misma (por motivos religiosos), el cual pertenecía a uno de los invitados. Ahmed hizo amago de marcharse del debate hasta que los del programa accedieron a quitar el vaso de vino con tal de no entorpecer el transcurso del programa.
El alcalde de Tilburg, debido a sus continuos problemas de integración con la comunidad, ha invitado a Ahmed a abandonar Holanda.
Un ejemplo. Negó que una de sus familiares, una niña, diera la mano al instructor del colegio en el fin de curso, una costumbre protocolaria que se realiza en esa fiesta. Todo ello debido a que la niña es de sexo femenino y no está bien visto esta conducta bajo sus arcaicos preceptos. Aparte, Ahmed no acepta las escuelas mixtas.
Ahmed también ha criticado a las cajeras de los supermercados porque no deberían uniformarse así, ni maquillarse o perfumarse como lo hacen, aparte de condenar las conductas homosexuales. Mientras, cobra pensión del país que le acoge mientras se pasa sus leyes por el forro de los huevos.
Morbo nombra alimaña de la semana a Ahmed Salam y a todos los seres que se aprovechan de la riqueza de una zona que ha sido ganada a costa de la educación, normas y leyes plurales y justas, sin aceptar las mismas e imponiendo las suyas. Y también a todos los que permiten la invasión de los musulmanes en otros países en los que su religión no es la oficial, amparándose en la multiculturalidad, pues les están abriendo las puertas a sus enemigos como un caballo de Troya.
Esperemos que dichos seres no pasen de la estratosfera nunca, el espacio exterior no les necesita.