En esta broma de Just for Laughs hacen que los pobre feligreses se traguen que un crucifijo que están clavando en una pared comienza a sangrar por los estigmas. Una monjita hace de gancho para engañarles con tareas de bricolaje y consigue que sostengan la figura de Jesús clavado en la cruz. En cuanto ésta se ausenta, la mano de Jesús comienza a soltar un chorro de sangre y la gente se pega unos buenos sustos. Lo mejor es cuando la monja comienza a rezar como si se encontraran ante un milagro, y la gente en plan WTF sosteniendo el crucifijo.