Me encanta este programa del canal Cuatro, cuyo formato se ha emitido en muchísimos paises. En él, una persona preparada y con experiencia en niños, asiste a padres que nó saben como resolver los problemas con sus hijos. Todo ello, seguido por una cámara en la que vemos como se portan los niños y qué tácticas usa la Super Niñera para solucionar los malos comportamientos.
El programa sigue siempre una misma estructura, en la que al principio, se presenta la familia. Luego la niñera estudia la familia unos días, para ir conociendo los fallos de los padres y los comportamientos de los niños. Solo supervisa, y no habla apenas, más que nada como una mera espectadora de la rutina familiar. Luego la niñera evalúa el caso y expone los problemas a los padres y cómo solucionarlos.
Más tarde, se presenta en la casa con unas normas u horarios que coloca en una cartulina. A partir de ese momento, la niñera toma parte activa corrigiendo a los padres in situ, rectificando malos hábitos y supervisando toda la rutina diaria. Cuando ya ha afianzado algo las normas, se separa de la familia una semana, para ver cómo llevan los padres las nuevas rutinas. Todo sigue siendo filmado por las cámaras en silencio, siendo testigos de lo que ocurre.
La niñera, al cabo de ese tiempo, vuelve y muestra en un video, algunos fallos específicos o puntos flacos que hayan cometido los padres en ausencia de ella, y termina pasando otra semanita en la que afianza finalmente todo el plan de educar bien a los niños. Y así termina todo el proceso, que suele durar unas 2 o 3 semanas.
En España, contamos con la psicóloga Rocio Ramos Paul, que es licenciada en psicología y tiene muchos años de experiencia con niños.
Entrevista con Rocio Ramos Paul:
NO HAY NIÑOS IMPOSIBLES
– ¿Qué ha supuesto para ti el éxito de la primera temporada?
– En general ha supuesto mucha satisfacción, por la acogida que tiene el programa y porque nuestro trabajo ha sido hecho con mucho respeto y eso es lo que recibimos de la gente.
– ¿Cuáles son los principales cambios para esta segunda temporada que ha comenzado?
En cuanto a cambios, tengo poco que contar por mi parte porque la metodología es la misma. Las mejoras tienen que ver con la otra parte del equipo.
– ¿Cuál es el caso más complicado que te has encontrado en Supernanny?
– Las dificultades siguen siendo las de la vida cotidiana. Todos funcionamos igual pero cada familia tiene matices, y ahí es sobre lo que nosotros trabajamos. Para cada uno su problema es el más importante, el que le urge solucionar. Para mí, la dificultad se presenta cuando los padres no quieren llevar a cabo un cambio, entonces no hay nada que hacer, pero no ha sido el caso porque cuando me llaman es porque hay voluntad de cambiar.
– ¿Existe una solución para cada caso o hay niños imposibles?
– No hay niños imposibles, no se puede partir de esa premisa nunca, si lo hiciéramos los estaríamos etiquetando. Ni niños, ni adultos. Lo que hay que hacer es buscar una solución para cada caso.
– ¿ Haces un seguimiento a las familias después de su paso por el programa?
– Sí que hago un seguimiento de los niños, como se hace en una terapia. Con los del año pasado ha habido llamadas, nos hemos visto en alguna ocasión y en el caso de los que han tenido alguna dificultad, me han llamado a la oficina. Y con los de esta temporada el seguimiento está en función de lo que he ido trabajando en cada casa, y me llaman aunque sólo sea para contarme que las cosas van bien.
– ¿Crees que los niños de hoy son más difíciles de educar que antes?
– No sé cómo eran los problemas antes, pero a los padres de ahora les preocupa mucho que los niños sean felices y se sientan seguros. Existe una necesidad de marcar los límites y poner normas, estas son las grandes dudas, que en realidad están relacionadas con todo lo que se nos plantea: poner límites, por ejemplo, es enseñar a comer. Los hábitos y las rutinas dan seguridad a los niños. Los padres quieren que sus hijos sean felices y eso se traduce en el orden en casa y en la seguridad.
– ¿Recomiendas a los padres el método de la pizarra y las normas?
– Yo recomiendo que se pongan normas, después que cada familia utilice el método que quiera.
– ¿Influye en el resultado final que los niños estén educados por terceras personas?
– Cualquier persona y cualquier circunstancia influyen en la educación de los niños, y más a estas edades en que son como esponjas. Si hablamos de terceras personas hablamos de los abuelos y de las chicas que están en casa para cuidarlos, y el esfuerzo que tienen que hacer los adultos es coordinarse.
– ¿Qué tienes que decirles a los padres que son partidarios de los azotes?
– A los partidarios de los azotes les digo lo mismo de siempre: que no son válidos porque no son eficaces, no educan. Y el gran riesgo es que los niños crean que los conflictos se solucionan a golpes.
– ¿Qué te pareció la imitación que hizo de ti Carlos Latre en Maracaná?
– La imitación me pareció muy divertida, por supuesto.
LA NANNY INGLESA
En Inglaterra, se emite también Super Nanny, aunque en este caso, la Super Nanny es Jo Frost, otra gran profesional con muchos años de experiencia.
He visto los episodios de la Nanny inglesa a través del canal autonómico TV3, y opino que los casos expuestos son mucho más graves que los que han sido expuestos en la edición española. Los niños son más traviesos y las situaciones más heavys. Vi unas niñas rubias que eran unas demonias, y en general son demasiado revoltosas.
Aparte, el papel de Jo Frost parece ser más severo, mientras que Rocio Ramos tiene un aire más tierno y sosegado. Eso sí, que si la inglesa parece más estricta, es porque los casos lo requieren. Desde mi opinión, ambas hacen un gran trabajo aportando técnicas diferentes en cada caso para dar ideas a los padres. A todo esto, Jo Frsot tiene unos ojazos azules muy bonitos.
Las diferencias entre las formas de la inglesa y la española son por ejemplo, que Rocio plantea las normas como actitudes a tomar, mientras que Jo Frost lleva generalmente auténticos horarios de rutinas, o que para mostrar los videos a los padres de lo que hicieron mal, Rocio lleva un peazo televisor con video VHS, mientras Jo Frost lleva un acertado y cómodo reproductor portatil de DVD.
Aparte, me hizo gracia aprender del doblaje de TV3 que «Super mainadera» era Super niñera, o que «canalla» es como se les llaman a los crios o niños allí en catalán.
Esta segunda temporada de Super Nanny española la he visto bastante suavecita, en la que los niños apenas eran muy problemáticos y según mi opinión, los problemas no eran tan graves, que los niños son niños al fin y al cabo.
Supernanny en el mundo
Inglaterra
• La Supernanny generó un nivel de audiencia masivo cuando se emitió por primera vez en el Channel 4 en el Reino Unido – un 43% por encima del espacio medio (5.583.000 en comparación con el espacio medio de 3.915.000).
Estados Unidos
• Las series de EE UU para la cadena americana ABC, también presentando a Jo Frost -la original Supernanny de Gran Bretaña-, atrajo semanalmente a más de 10 millones de espectadores.
• El libro de la Supernanny sobre el cuidado de los niños se convirtió directamente en el número 1 de la lista de los más vendidos del New York Times.
Alemania
• La versión de RTL consiguió una sorprendente cuota del mercado del 25.4% cuando emitió su versión nacional el 19 de septiembre del 2004, sobrepasando el habitual 17,5% por el mismo espacio.
Francia
• M6 Francia generó un 40% por encima del espacio de la cuota de mercado de las temporadas anteriores y una media general de 4,3 millones de espectadores por episodio.
Australia
• El primer episodio alcanzó una media del 11.3 % de la cuota a lo largo del país. Supernanny ganó el espacio por delante de las series ‘Will and Grace’ (Siete) y ‘American Idol’ (Diez).
Dinamarca
. Episodio 1: Un 16.6% de la cuota de mercado (objetivo principal grupo de edad entre 14-49 años).
. Episodio 2: Un 19% de la cuota de mercado.
Países Bajos
. Consiguió una media del 16.6% de los índices del mercado (Grupo de edad entre 20-49) – el doble del porcentaje de la media de los espectadores viendo un programa en ese espacio de tiempo.
Es muy fácil ( y divertido ) ir a casa ajena y opinar.
y el que diga lo contrario es un hipocreasionista, que no está
en los dicccionarios. NO BUSCAR.
Es lo que suele decir mucha gente, lo de que no es lo mismo la práctica que la teoría, pero Rocío no es solamente una mujer que habla y habla sin razón, porque todo lo que ha aprendido a lo largo de los años, y está enseñando a otros padres, está basado en experiencias reales, y lo más importante, en éxitos de aprendizaje.
Ante todo felicitar a la super Nanny, soy un Argentino ya abuelo, tengo un nieto en Argentinay una nieta en Alemania y por esa razon sigo el programa con atencion y puedop decir que e visto casos dificilisimos que con esos metodos se han corregidos.
El punto principal es que de esta manera se disfruta delos hijos y no se los padese.Y a su ves los niños crecen no solo felices sino con capacidad de afrontar los problemas que les acareara la vida.
Me vuelvo a mi pais proximamente,y veo con preocupacion que mi nieto de casi 4 años empieza a tener problemas de conducta por la pronta aparicion de una hermana.Quisiera saber de algun libro o video de algun caso que pudiera comprar, espero quer me puedan dar el dato .GRACIAS Y UN ABRAZO A TODO EL EQUIPO
Soy de la década del 70, y antes se educaba de otra manera.
Fui azotado desde pequeño y hasta más o menos los diecinueve años. Me pegaban con el cinturón sobre las nalgas denudas, y a veces en las piernas.
Los castigos eran desde, por travesuras hasta por razones más graves, como una mala nota en el colegio o llegar tarde.
Era casi un ritual. Sabía que si mi padre se sacaba el cinturón, yo debía hacer lo propio, bajando mis pantalones y calzoncillos, casi como un acto reflejo.
Los correazos iban desde diez, por una falta menor, hasta cincuenta, por una falta más grave.
Si no me comportaba correctamente sabía lo que me esperaba.
No guardo ningún rencor, en esos tiempos era normal. A casi todos mis amigos y compañeros del colegio les pegaban con el cinturón.
me parece bastante ignorante el comentario de COSMOS ya que como profesional de la psicologia obviamente debo mirar las casa ajenas para llegar a una conclusion OBJETIVA de lo contrario no podria….solo una persona de AFUERA puede hacernos ver nuestra fallas ya que en ella no imfuyen las Subjetividades
hola me pareces estupenda como nany , tengo un pequeño problema, mi hija no me hace caso cada vez que la mando hacer algo , ella me escucha pero es demasiado lenta , y luego tengo que repetirselo 50 veces y ya no se que hacer la verdad la paciencia no es una de mis virtudes , esto es un continuo … ella sabe que tiene que hacer sus tareas domesticas osea sus cosas de la habitacion que es barrerla y organizar su ropa , ella tiene 8 años y se llama ainhoa y a veces le digo que le voy a comprar algo y me hace caso pero lo hace muy lento sabe , que debo hacer gracias por su recomendacion …. igual he pensado en llevarla a un psicologo infantil , pero antes de llevarla he pensado en escribirle a usted muchas gracias de antemano ….
Soy maestra de primaria, por tanto algo sé de teorías educativas. La supernanny española (la otra no la he visto) utiliza métodos conductistas. El conductismo surgió como consecuencia de no poder medir objetivamente la mente del individuo. Sin embargo, las conductas sí se pueden analizar objetivamente; no así, como ya he dicho, los motivos psíquicos que las impulsan.
Por tanto el conductismo no tiene en cuenta las particularidades del ser humano; no va al origen de la conducta; sino que trata solamente de modificarla. Por ejemplo la supernanny no se para a analizar porque los niños están más irritables de lo normal; ella simplemente intenta cambiar esa conducta, sin analizar el origen. Porque tal vez, si así lo hiciera, tendría que llegar a la conclusión de que muchas veces, por ejemplo, ese nerviosismo va asociado a la poca conciliación familiar-laboral de los padres. Claro, eso sería hacer responsables a los padres de la situación. Es mucho mejor para la audiencia hacer responsable siempre del mal ambiente de la casa a los niños.
Recordemos que nuestros hijos son personas, con los mismos derechos que los adultos. ¿A nosotros nos gusta que nos obliguen a comer algo que aborrecemos? ¿Nos ponen un reloj marcando tiempo límite para comer? ¿Se nos ignora deliberadamente cuando estamos llorando o afligidos? ¿De verdad queremos después tener en casa adolescentes respetuosos y democráticos? ¿Cómo lo conseguiremos con estos métodos?