¿Sabías que las piezas de fruta desecada son muy nutritivas para el organismo? Lo mejor es que contienen los mismos nutrientes que la fruta fresca, pero condensados en un alimento mucho más pequeño.
De esta manera, podremos comprobar que nos aportan en torno a 3,5 veces más fibra, vitaminas y minerales que las frutas frescas originales.
Por lo tanto, si nos acostumbramos a ingerir fruta desecada, estaremos proporcionando a nuestro cuerpo un gran porcentaje de la ingesta diaria recomendada de muchas vitaminas y minerales necesarias para tener una salud férrea.
Entre las virtudes de la mayoría de frutas desecadas, encontramos que contienen mucha fibra y son una gran fuente de antioxidantes, como por ejemplo polifenoles, los cuales poseen efectos antiinflamatorios.
Esta clase de antioxidantes nos brinda grandes beneficios para nuestra salud, como la mejora del riego sanguíneo, el tracto digestivo, la disminución del daño oxidativo y la reducción del riesgo de muchas enfermedades cardiovasculares.
Elaboración de los orejones secos
En este artículo vamos a profundizar sobre los beneficios nutricionales de los orejones secos, los cuales se producen deshidratando piezas de albaricoque.
Para elaborar los orejones, simplemente pelamos, troceamos y desecamos la fruta original con el fin de quitarle el excedente de agua. Así logramos que se conserven durante muchos meses sin perder propiedades nutricionales, ya que al quitarles el agua, evitamos su degradación.
Existen varias formas de secar el albaricoque para lograr el orejón seco, siendo dejarla secar al sol la manera más tradicional, sobre todo en entornos con clima seco; o bien en hornos si se precisa acelerar el proceso de deshidratación.
No existen diferencias significativas en cuanto a la variación del proceso, ya que simplemente se busca extraer el agua de la fruta. Mientras que el proceso de secado al sol puede tardar en torno a la semana, en un horno la fruta se deshidrata a una temperatura baja durante unas 12 horas.
Al final lograremos unos deliciosos orejones secos que, aunque tendrán una consistencia más contundente y flexible, serán suaves al tacto. Como hemos dicho, envasados posteriormente en frascos o envases que preserven el ambiente seco, se conservarán impecables durante meses.
Propiedades de los orejones secos
Entre las propiedades de los orejones de albaricoque, una muy evidente es que son una forma muy agradable de comer fruta si nos cuesta tomar fruta natural.
Y es que no son pocas las personas que simplemente por comodidad, no suelen tomar la fruta que deberían, ya que hay que reconocer que pelar y preparar la fruta puede ser un poquitín pesado.
También puede ser que no nos apetezca tomar la fruta natural, pero deshidratada sí nos resulte más apetecible a modo de snack. Por eso pueden ser un gran aliado para la alimentación de los niños que les cuesta o no suelen ser muy dados a tomar fruta.
Entre las propiedades nutritivas de los orejones de albaricoque, encontramos numerosos nutrientes muy convenientes para la salud de nuestro organismo.
Potasio: Unos 100 gramos de orejones secos de albaricoque contienen en torno a unos 1200 mg de potasio, siendo esta cifra el 27% de la cantidad diaria recomendada (hombres adultos). Este es uno de los siete macrominerales esenciales para el organismo, por lo que su ingesta es bastante importante.
Un ejemplo de su importancia es que un consumo adecuado de potasio reduce el riesgo de mortalidad general en un 20%. También disminuye el riesgo de sufrir un derrame cerebral, reduce la presión arterial, evita que perdamos masa muscular, conserva la densidad mineral ósea y reduce la formación de cálculos renales.
Las principales funciones del potasio en el cuerpo incluyen la regulación del equilibrio de los fluidos, así como el control de la actividad eléctrica del corazón y otros músculos.
Betacaroteno (Vitamina A): El betacaroteno es un pigmento que forma parte de la familia de los carotenoides y otorga el característico color amarillento o anaranjado a los orejones secos.
Aparte de su poder antioxidante para beneficio de nuestro cuerpo, el betacaroteno se transforma en vitamina A en el organismo, pero sólo cuando es necesario.
Esta vitamina juega un papel crucial en el mantenimiento de la piel, tanto interna como externa, protege nuestra salud ocular y nos ayuda a tener un pelo sano y dientes y huesos fuertes.
Además, las investigaciones indican que la vitamina A se ha vinculado con una reducción de las tasas de cáncer y enfermedades cardíacas.
Unos 100 gramos de orejones secos de albaricoque contienen en torno a unos 107 microgramos de vitamina A, lo que supone casi el 12% de la cantidad diaria recomendada (hombres adultos).
Vitamina C: La vitamina C refuerza el sistema inmunológico, promueve la curación y ayuda a prevenir el cáncer, las enfermedades cardíacas y los accidentes cerebrovasculares. De nuevo nos encontramos ante un antioxidante esencial para una salud estable.
En este caso, unos 100 gramos de orejones secos de albaricoque contienen cerca de 2 mg de vitamina C, estando esta cifra en torno al 2% de la cantidad diaria recomendada (hombres adultos).
Vitamina E: Las investigaciones indican que la vitamina E es particularmente eficaz en la prevención de las enfermedades cardíacas y el cáncer de mama.
Mientras que la vitamina E se encuentra principalmente en los aceites vegetales, las nueces, las semillas y el germen de trigo, los orejones secos contienen una cantidad considerable de este nutriente.
Unos 100 gramos de orejones secos de albaricoque contienen en torno a unos 4,4 mg de vitamina E, lo que supone casi el 30% de la cantidad diaria recomendada (hombres adultos).
Niacina (Vitamina B3): Los orejones secos de albaricoque contienen 2,87 mg de niacina (también conocida como vitamina B) por cada 100 gramos, lo que supone casi el 20% de la cantidad diaria recomendada (hombres adultos).
La vitamina B3 nos ayuda a reducir el colesterol y los triglicéridos, por lo que es excelente para prevenir problemas cardiovasculares. También nos sirve para aliviar la artritis y aumentar la función cerebral, entre otros muchos beneficios.
Si sufrimos pérdida de memoria y confusión mental, fatiga, depresión, dolores de cabeza, diarreas y problemas de piel, la vitamina B3 puede ayudarnos a mermar estos males.
Hierro: Como buen fruto seco, los orejones de albaricoque tienen un alto contenido en hierro.
Este mineral esencial es necesario para que el cuerpo produzca hemoglobina, una proteína que se encuentra en los glóbulos rojos y ayuda a transportar el oxígeno por todo el cuerpo. También desempeña un papel vital en el apoyo al sistema inmunológico.
El hierro también ayuda a mantener nuestros niveles de energía, a regular la temperatura corporal e incluso mejorar el rendimiento deportivo.
Si no ingerimos suficiente hierro, podemos sentirnos cansados y tener más tendencia a sufrir infecciones. Una falta grave de hierro podría incluso provocar anemia por deficiencia de hierro, que causaría palidez en la piel, sensación de falta de aliento y palpitaciones cardíacas.
En cuanto al hierro, unos 100 gramos de orejones secos de albaricoque contienen cerca de 2,7 mg de hierro, una cifra que supone el 22% de la cantidad diaria recomendada (hombres adultos).
Más nutrientes
En el tintero nos dejamos muchos más nutrientes como vitaminas B2, B5 y B6; y minerales como el calcio, magnesio, fósforo, sodio, zinc o incluso boro, conocido por aumentar los niveles de estrógeno en las mujeres posmenopáusicas, estimular el cerebro y ayudar en la prevención de la osteoporosis.
Todos estos nutrientes también se encuentran en los orejones secos en cantidades bastante generosas, y es que como ocurre con todos los frutos secos, nos encontramos ante un alimento muy completo.
Respecto a la ingesta calórica, cabe recalcar que contienen unas 234 calorías por cada 100 gr y apenas 0,5 gr de grasa. Ya de por sí no es un aporte excesivo, pero si sumamos que tiene casi 8 gr de fibra por cada 100 gr de fruta, el tránsito intestinal funcionará mejor y nos ayudará en nuestra dieta.
Y es que, gracias a este moderado aporte calórico respecto a los nutrientes aportados, el orejón seco de albaricoque resulta ser el mejor snack para picar entre horas y quitarnos el hambre de una forma saludable.