En este post vamos a desvelar lo que es el tarot y cómo se emplea para adivinar nuestro futuro o ayudarnos a recibir consejos. Y es que más allá de ser un arte arcano, el tarot también nos ayuda a establecer un diálogo entre nuestra conciencia y el futuro oscilante que nuestra mente aún ni ha reconocido.
Aunque se trata de una técnica que lleva siglos entre nosotros, gracias a la tecnología actual ha evolucionado de tal manera, que incluso es posible realizar una lectura de tarot gratis con una tirada completa a través de Internet como una forma rápida de ayudarnos en nuestra vida diaria.
El tarot es un arte adivinatorio que no sólo nos enseña sobre el futuro, sino que nos puede ayudar a interpretar hechos del presente, el pasado o incluso los sueños a los que no sepamos dar explicación, por lo que es una herramienta muy valiosa para enfrentarnos a los problemas con conocimiento de causa.
Los orígenes del tarot se remontan al siglo XIV, y desde entonces, todo lo que lo rodea ha estado envuelto en un halo de misterio, atrayendo la curiosidad de numerosas personas que han buscado respuestas al enigma de su funcionamiento.
¿Cómo funciona el tarot?
El tarot se basa en el empleo de una baraja de 78 cartas especiales que se divide en dos clases: 22 arcanos mayores y 56 arcanos menores. La palabra arcano proviene del término en latín «arcanum», que significa misterio, oculto, secreto o encerrado, lo que da una idea del caracter místico de esta baraja.
En el tarot existen dos figuras: una persona que intenta buscar respuestas (o consultante), y otra persona (o tarotista) que realiza la tirada de cartas (lo que comunmente se llama echar las cartas).
La tirada de cartas se podría definir como un rito lleno de misticismo en el que, tras mezclar las cartas previamente para que no exista un orden específico, se escogen unas pocas que se dispondrán de cierta manera para luego interpretarlas.
La forma de escoger y disponer estas cartas, vendrá dada por el sistema escogido para realizar la tirada, ya que existen varios métodos y cada tarotista empleará el o los que considere adecuado/s según cada caso.
Respecto a la interpretación, los arcanos mayores nos muestran una visión global de la lectura, así como el principio y el final de las etapas ocasionales de cada individuo. En cambio, los arcanos menores facilitan información más concreta sobre la lectura.
Asimismo, las cartas se subdividen en cuatro palos, dando cada uno de ellos información relacionada con ámbitos diferentes de la vida de cada persona.
- Los oros nos proporcionan una interpretación de la situación económica de la persona que consulta.
- Los bastos, en cambio, se refieren a temas pasionales de cada individuo.
- Las espadas nos hablan de los problemas o situaciones conflictivas que tenga el consultante.
- Las copas se encargan de desvelar la información de la vertiente emocional de la persona.
Hay dos maneras de emplear el tarot como forma de adivinación: las tiradas y las consultas.
Las primeras están más encaminadas a realizar una lectura inmediata acerca de una pregunta sencilla o un asunto específico, mientras que las segundas tienen una mayor profundidad y precisan una concentración y conexión mayores por parte del tarotista.
De este modo, las consultas proporcionan una lectura más exhaustiva referente a los asuntos que sean del interés del consultante: amor, dinero, salud, etc.
¿Cómo nos ayuda el tarot?
A día de hoy, el tarot es un recurso en alza y que interesa a mucha gente. Esto es debido a la gran cantidad de personas que buscan una forma fiable de solucionar diversas situaciones, aunque muchos no saben que también puede utilizarse como una manera de conocerse a uno mismo y proseguir un desarrollo espiritual.
De esta forma, incluso cuando no busquemos conocer nuestro futuro, pero sí alberguemos preocupaciones que nadie haya conseguido desvelar, el tarot nos será de gran ayuda en este sentido.
Al efectuar una tirada de cartas, nos adentramos en nuestra propia mente como una forma de sanarla. Frecuentemente se necesita tiempo para descubrir la verdadera causa de la consulta, siendo difícil desvelar lo que realmente necesitamos preguntar.
En la consulta efectuada a través del tarot, podremos hallar la calma con la que reordenar nuestros pensamientos y deseos, así como apaciguar nuestros miedos. Y es que a fin de cuentas, entenderemos que no somos tan diferentes de otras personas.
Por eso, debemos acudir al tarot no sólo para saber más sobre nuestro futuro, sino como forma de tener más consciencia de nuestras fantasías subyacentes. También para ayudarnos a establecer un vínculo con una realidad donde cada vez tengamos menos miedos y temores.
Así que, más allá de un arte adivinatorio, el tarot puede ayudarnos a descubrirnos a nosotros mismos como una útil lección de vida.
Tipos de tiradas
Como hemos comentado antes, existen diferentes formas de tirar las cartas. Normalmente cada tarotista tiene sus preferencias, porque a fin de cuentas, las cartas son una forma de manifestar el fluido magnético o poder psíquico que posee.
Es por ello que, dependiendo de lo que el tarotista necesite responder al consultante, podrá realizar diferentes clases de tiradas de tarot, ya que cada una canalizará la energía de manera distinta.
La tirada más básica es la de tres cartas en horizontal, donde la carta que queda a la izquierda representa el pasado, la central el presente y la de la derecha el futuro. Si se trata de responder a un problema, podremos ver lo que originó ese incidente, lo que lo está causando y formas de resolverlo.
La tirada de cinco cartas se dispone en forma de cruz y nos dirá cómo hacer frente a un problema. Las tres cartas centrales funcionan de forma muy parecida a la tirada de tres cartas, quedando la carta superior para dar información sobre cómo terminará el asunto, y la carta inferior para decirnos qué ha causado el problema actual.
La tirada de la cruz celta es otra bastante utilizada, empleando diez cartas para formar una especie de cruz y línea al lado, aunque podemos encontrar variantes en su disposición. Resulta muy completa, ya que cada carta servirá para darnos una información concreta sobre la consulta.
De la carta 1 a la 10, esto es lo que revela cada una de ellas: condición presente, obstáculos del presente, mejor desenlace, el origen del conflicto, el pasado reciente, el futuro inminente, identidad del consultante ante el problema, entorno del consultante respecto al problema y expectativas ante el asunto. Finalmente, la diez, el resultado del problema.
La tirada de herradura emplea siete cartas que se disponen en forma de uve extendida. Por orden desde la izquierda, nos dan datos sobre: el pasado, el futuro, los influjos ocultos, el consultante, las personas del entorno, qué dirección se debe tomar ante el problema y el desenlace del asunto.
Una modalidad muy empleada actualmente es la tirada de tarot sí o no, que emplea generalmente cinco cartas y suele servirnos para multitud de circunstancias. La principal ventaja de este método es que nos proporcionará una lectura completa y minuciosa a preguntas de cualquier clase, dándonos consejos para resolverlos.
Otra característica de la tirada de tarot sí o no, es que también servirá para mostrarnos información de la vertiente personal y espiritual de la persona consultante.
Fuente: sitio de tarot.