La noticia ha saltado como la polvora. Se han comparado dos fotografías, una actual, la otra de hace siete años, de dos barrancos de Marte, y se han encontrado diferencias; exactamente unos brillantes depósitos, que sugieren que ha habido erosión por una corriente, presumiblemente de agua.
Todo parece indicar que las huellas se comportan igual que un transporte de sedimentos por agua, con dedos ramificados.
Se sabe que existe agua de vapor y hielo en Marte, pero estas nuevas observaciones de agua líquida abren nuevas puertas a pensar en vida microbiana. Normalmente en Marte el agua suele evaporarse rápidamente o congelarse, debido a su fina atmósfera y las bajas temperaturas que existen, pero puede haber brotado de una fuente subterranea y haber transportado los sedimentos ladera abajo antes de congelarse.
Se cree que estos flujos son agua, quizás en forma de escarcha, o posiblemente sedimentos salinos por su color claro. Si fueran desprendimientos de tierra, serían más oscuros.
El anuncio actual es el primero en revelar un nuevo depósito de material transportado, aparentemente por fluidos, después de haberse fotografiado anteriormente los mismos barrancos sin la existencia de esos depósitos. Los dos sitios se encuentran dentro de cráteres en las regiones de Terra Sirenum y de Centauri Montes, en el hemisferio austral marciano.
Estos depósitos frescos sugieren que en algunos lugares y momentos del Marte actual, el agua líquida emerge desde debajo de la superficie y fluye brevemente ladera abajo. Esta posibilidad hace surgir preguntas sobre cómo es que el agua podría permanecer líquida debajo de la superficie, de cuán extendida podría estar, y si hay algún hábitat subterráneo húmedo que podría sostener vida. Las misiones futuras nos darán las respuestas.
Además de buscar cambios en los barrancos, el equipo de la cámara orbitadora valoró la frecuencia en la cual aparecen nuevos cráteres de impacto. La cámara fotografió, en 1999, aproximadamente el 98 por ciento de la superficie marciana, y aproximadamente el 30 por ciento del planeta fue fotografiado nuevamente en 2006. Las imágenes más recientes muestran 20 nuevos cráteres de impacto, que varían en diámetro desde los 2 metros hasta los 148 metros, y que no existían aproximadamente siete años antes. Estos resultados concuerdan aproximadamente con las predicciones e implican que el terreno marciano con pocos cráteres es realmente joven.
La Mars Global Surveyor comenzó a orbitar alrededor de Marte en 1997. La nave es responsable de muchos descubrimientos importantes. La NASA ha perdido contacto con ella desde principios de noviembre. Los intentos para re-contactarse continúan. Su longevidad sin precedentes ha permitido el monitoreo de Marte por varios años más allá de su vida proyectada.