El uso de la bomba de calor como sistema para la obtención de agua caliente sanitaria está cada vez más en auge por los buenos resultados que da, el bajo gasto energético que supone y el confort que proporciona en el hogar.
Para sacarle todavía mayor rendimiento a la bomba de calor, no podemos obviar algunos pequeños gestos que alargarán su vida útil y con ella todos sus beneficios:
Mantener el aparato limpio y en perfecto estado.
Parece una obviedad, pero lo cierto es que muchas veces olvidamos limpiar periódicamente los filtros y es justamente aquí donde el polvo y otras sustancias acaban depositándose.
Su obstrucción puede ser el origen de una reducción del calor, así que hay que prestar especial atención al estado de las unidades exteriores.
Desinfectarlo para eliminar bacterias.
Para evitar que algunas bacterias se alojen en el dispositivo y crezcan en él, podemos limpiarlo con productos higienizantes apropiados para este tipo de aparatos.
Todos los modelos de bomba de calor para agua caliente de Ariston.com ya están diseñados con un sistema anti legionela gracias a un ciclo de calentamiento del agua automático creado para prevenir la proliferación de bacterias.
Encargar revisiones regulares a un experto.
Siempre es mejor contar con la ayuda de un profesional que conocerá a la perfección el funcionamiento de nuestra bomba de calor y podrá comprobar su estado general, además de efectuar las reparaciones que sean necesarias de forma segura y con todas las garantías.
Colocar la unidad exterior en un lugar libre de obstáculos.
Las plantas u otros objetos pueden convertirse en elementos que supongan una dificultad para su funcionamiento, por lo que se recomienda retirarlos.
Elegir un modelo con una capacidad suficiente para nuestras necesidades.
Según la cantidad de personas que forman el núcleo familiar, debemos plantearnos optar por una bomba de mayor o menor tamaño. Las hay que pueden contener desde 80 litros hasta 300 litros, soliéndose recomendar unos 40 litros por persona.
Conocer todos los datos y especificaciones del modelo, especialmente el COP.
El coeficiente de rendimiento (COP) es el dato que se utiliza para saber el nivel de eficiencia del aparato y que aparece en la información de los datos técnicos. Para calcularlo se toma en cuenta la energía que llega al equipo y el calor que este produce. A mayor COP, mayor eficiencia energética.
Ajustar la temperatura sin pasarse de grados.
Entre los 30º y los 35º es más que suficiente para darse un baño o una ducha de manera confortable y sin pasar frío. Cada grado de más aumentará innecesariamente el consumo energético.