Tutorial para hacer una máscara o mascarilla casera con la que protegernos del coronavirus, confeccionada aprovechando botellas de plástico PET y otros materiales que solemos tener por casa. Es otra variante de tapabocas o cubrebocas que podemos elaborar en casa para evitar contagiarnos y enfermar de COVID-19.
Los materiales que vamos a necesitar son estos:
- Una botella de plástico PET de rosca ancha, como la de las botellas de agua de 5 litros.
- Una botella de plástico PET de 2,75 o 3 litros.
- Dos botellas pequeñas de plástico PET.
- Un cuchillo.
- Unas pinzas.
- Un cutter.
- Una sartén.
- Un clavo.
- Un trapo o trozo de tela.
- Una plancha.
- Unas tijeras.
- Una regla.
- Pegamento de contacto.
- Silicona fría.
- Un rotulador marcador o resaltador.
- Tres trozos de goma eva o foam: uno de 1,5 cm x 40 cm, otro de 1 cm x 40 cm y otro de 3 cm x 7 cm.
- Alcohol.
- Algodón.
- Una gasa estéril.
- Un elástico delgado.
- Carbón activado, si es posible (podemos conseguirlo en farmacias, tiendas químicas o acuarios).
Elaboración
1. Delineamos el contorno de la botella de 3 litros a una distancia de cinco centímetros del tapón. Utilizamos esta botella mediana porque conseguiremos una circunferencia de unos 37 cm.
2. Cortamos la botella por la línea trazada ayudándonos del cutter y las tijeras.
3. Marcamos la botella por un lado y el otro lado opuesto, las líneas deben tener unos 3 cm aprox.
4. En una de esas líneas ahora hacemos una marca a 2 cm empezando desde la parte más cercana al tapón.
5. En el lado contrario, donde está la otra línea de 3 cm, hacemos dos puntos equidistantes a los lados.
6. Las marcas que hemos hecho nos servirán como guías para delinear una circunferencia que uniremos desde la marca del paso 4 y que cruzará la línea y puntos del paso 5. La circunferencia estará un poco ladeada.
7. Ahora con las tijeras cortamos por esta circunferencia, eliminando el sobrante.
8. Como veis, esta parte de la botella queda cortada de forma un poco ladeada. Y en una parte nos quedará una marca del rotulador marcador que nos servirá como referencia. Desde ahora le llamaremos «marca de referencia».
9. Ahora cortamos los cuellos de los tapones de la botella grande y las dos pequeñas. Si la botella grande tiene un asa, la retiramos, no sirve.
10. Para ello emplearemos el cuchillo, que previamente calentaremos en una llama para dejarlo al rojo vivo si es posible.
11. Y vamos cortando los cuellos de los tapones, justo donde termina cada parte de la rosca.
12. Dejamos calentando la sartén y aprovechamos el calor de la misma para ir alisando las bases de las tres roscas de los cuellos de botella que hemos cortado.
13. Ahora ayudándonos de las pinzas, sostenemos el clavo y lo llevamos a la llama para ponerlo al rojo vivo también.
14. Y realizamos agujeros en los tapones de las roscas.
15. Colocamos la rosca de la botella grande sobre el cuello de la botella mediana y delineamos el contorno.
16. Calentamos el cuchillo en la llama y lo utilizamos para cortar la línea que acabamos de hacer en la botella mediana.
17. Nos quedará así. Lijamos el corte que hemos hecho para que no existan bordes serrados.
18. Ahora pegamos la rosca de la botella grande a la parte de la botella mediana empleando silicona fría.
19. Ojo, al meterla, tenemos que hacerlo por la parte interior del trozo de la botella mediana.
20. Y sellamos también por la parte exterior con más silicona fría. Dejamos secar para que quede bien pegado.
21. Tomando como referencia la «marca de referencia» que dejamos en la botella mediana, dibujamos dos pequeñas líneas horizontales equidistantes a los lados, que quedarán a 2 cm de la rosca.
22. Utilizaremos estas dos líneas como referencia para delinear dos círculos empleando las roscas de las botellas pequeñas.
23. Con el cuchillo de nuevo caliente, cortamos estas circunferencias para dejar dos huecos.
24. Comprobamos que las roscas pequeñas pueden enroscarse en los agujeros.
25. Utilizamos el alcohol para limpiar la tinta de haber dibujado en las botellas y lijamos los agujeros que hemos hecho para que no existan bordes dentados.
26. Desechamos los aros que tengan las roscas pequeñas y pegamos las roscas encajándolas en los dos huecos redondos. Utilizaremos para ello silicona fría. De nuevo, encajaremos las roscas desde el interior de la botella mediana.
27. Sellamos las dos roscas con silicona fría también por fuera.
28. De la parte sobrante de la botella mediana, cortamos seis círculos de plástico. Nos ayudaremos del tapón grande y los dos pequeños como referencia. Así tendremos dos círculos de plástico grandes y cuatro pequeños.
29. Volvemos a recortar un poco los círculos que hemos hecho para que quepan en el interior de los tapones.
30. Antes de encajar esos círculos en los tapones, calentamos de nuevo el clavo y nos ayudamos del mismo para confeccionar agujeritos en los círculos de plástico.
31. Como los círculos se nos quedarán algo doblados al haberlos manipulado con el clavo ardiendo, los ponemos debajo de la tela y los vamos planchando (plancha a nivel medio). La tela la empleamos para proteger los círculos de plástico del calor directo. Mientras vamos planchando, con nuestros dedos vamos aplanando la superficie para que al final nos quede el círculo de plástico lo más plano posible.
32. Desempaquetamos la gasa y nos ayudamos del tapón para cortarlo. Luego lo volvemos a cortar de nuevo para que encaje en el interior del tapón.
33. Aplicamos silicona fría en el interior del tapón grande, sólo dibujando una circunferencia (no aplicamos silicona por el centro del tapón).
34. Pegamos el círculo de gasa al interior del tapón, ayudándonos del clavo para que encaje mejor.
35. Volvemos a aplicar silicona fría formando una circunferencia por los bordes del círculo de gasa y pegamos el círculo de plástico agujereado.
36. Ya podemos enroscar el tapón grande en la rosca grande.
37. Luego aplicamos más silicona en el interior del tapón, dibujando una circunferencia. Con un poco de algodón formamos un pequeño disco y lo pegamos al interior del tapón.
38. Si disponemos del carbón activado, ahora es el momento de depositarlo en el algodón. Volvemos a colocar otro disco de algodón para encerrar el carbón activado dentro.
39. Aplicamos silicona fría delineando una circunferencia y colocamos un disco de gasa para pegarlo.
40. Volvemos a aplicar más silicona bordeando el disco de gasa, y colocamos el otro disco de plástico.
41. Con la silicona, sellamos el disco de plástico bordeándolo.
42. Realizamos la misma operación con los dos tapones pequeños, aunque en ellos no utilizaremos el carbón activado. O sea, colocar por este orden: disco de gasa, círculo de plástico, algodón, disco de gasa y círculo de plástico. Siempre aplicamos silicona en cada borde para asegurarlo todo.
43. En el lado opuesto a la «marca de referencia», tendremos que moldear la botella para darle forma de pico y que así la nariz pueda entrar bien. Con los dedos, le daremos forma triangular.
44. Limpiamos con el alcohol las marcas del rotulador marcador, dejando como referencia un pequeño punto en el lado contrario al pico donde va la nariz. O sea, la «marca de referencia», que antes era una línea más grande, la dejamos en un puntito más discreto.
45. Aplicamos una línea de pegamento de contacto en la tira de goma eva o foam de 1,5 cm x 40 cm. Con un palito extendemos mejor el pegamento por toda la tira.
46. Con el mismo palito, aplicamos pegamento en el borde exterior e interior de la mascarilla.
47. Ahora pegamos la tira a lo largo del borde de la máscara, de forma que quede mitad de la tira por fuera.
48. Y ahora remetemos la mitad que ha quedado fuera hacia el interior de la mascarilla.
49. Cortamos el trozo de goma eva o foam de 3 cm x 7 cm para que tenga una forma de ojo, montecito, semielipse o semicírculo aplanado.
50. Ahora pegamos esta pieza a la zona de la nariz de la mascarilla. Para ello aplicamos primero pegamento en esa zona de la nariz y luego en el trozo de goma eva o foam (por la zona más recta que no es tan circular).
51. Una vez pegada, la podemos recortar un poco para que se adapte mejor a nuestra fisionomía.
52. Ahora utilizamos la tira de goma eva o foam de 1 cm x 40 cm para rodear los tapones por la base exterior. Cortaremos trozos y los pegaremos con el pegamento de contacto. Esta parte es más para embellecer la máscara.
53. Ahora realizamos dos marcas a cada lado de la mascarilla, más o menos donde las veis en la imagen de abajo, situadas en el borde donde pegamos la primera tira circular de goma eva o foam.
54. Con el cuchillo caliente, realizamos unas perforaciones en las cuatro marcas, de modo que queden unos huecos en forma de pequeña línea.
55. Ahora pasamos la cinta elástica por los huecos y dejamos el largo adecuado a nuestra medida de cabeza.
56. Sellamos las cintas en la parte que se enganchan a la máscara. Podemos emplear pegamento o bien podemos coserlas con hilo para unirlas.
57. Debemos dejar que se airee todo unas horas para que se vaya el olor del pegamento.
58. Ya tenemos nuestra mascarilla, máscara, tapabocas, cubrebocas o barbijo confeccionado con botellas PET. Es que existen tantos nombres… Aunque no son tan eficaces como las mascarillas profesionales, no está de más tener alguna máscara así por si acaso.
Si no tenemos exactamente estos materiales, podemos realizar nuestra propia versión, saltarnos algún paso o modificarlo, ya que la inventiva puede ayudarnos a cambiar la forma de hacer esta mascarilla según nuestras posibilidades.
Aquí tenéis en vídeo el mismo tutorial para hacer una mascarilla casera con la que protegeros del coronavirus, confeccionada con plásticos PET. Puede que os sirva para aclararos más si las imágenes no os resultaron de ayuda en algún paso.
Vídeo original: https://www.youtube.com/watch?v=CDc7vbWEP_s