Hoy por hoy está mas que probado que si no tienes presencia en internet, es prácticamente lo mismo que no existir. Redes sociales y buscadores como Google se han convertido en el lugar obligado y preferido de los usuarios para buscar aquello que necesitan, ya sea que se trate de un producto o de un servicio.
Ante esto, efectivamente, crear un sitio web es un primer paso, pero también es necesario conseguir tráfico en él, ya sea para vender productos, comunicar sobre los propios servicios, en definitiva: convertir a un usuario en cliente.
Recordemos que desde el punto de vista de Google, es fundamental ofrecer resultados coherentes que respondan a las expectativas de los usuarios. Esto es lo que se conoce como posicionamiento natural, y es la piedra angular de muchos aspectos del marketing digital.
Para lograr que Google considere nuestra página web como un resultado coherente a la búsqueda que realizo el usuario, debemos trabajar muchos aspectos de la misma, incluso a veces, contratar especialistas de SEO, pero una de las variables que muchas veces se pasa por alto es la elección del dominio para nuestro proyecto, un error que podrimos pagar demasiado caro a futuro.
Elegir un dominio que potencie el posicionamiento orgánico
Los dos aspectos más importantes en los que el dominio ayuda a mejorar tu seo tienen que ver con la geolocalización, imprescindible si queremos potenciar el SEO Local y la fijación de marca, algo que debe ser prioridad en cualquier estrategia de marketing digital o posicionamiento, ya sea orgánico o no.
Veamos estos dos puntos en más detalle.
La Geolocalización
Tanto Google como otros buscadores, hacen una clasificación de los sitios web a través de la extensión de su dominio (entre muchísimas otras variables, claro está). Esta clasificación de base discrimina entre extensiones genéricas (.com, .net, .info, etc,) y extensiones geográficas (.es, .ar, .mx, etc.)
Esta sectorización que hace, basada en la terminación del dominio, le permite a la vez favorecer determinados resultados en función de las zonas geográficas. En otras palabras, es cierto que los sitios web con dominios mx tendrían más probabilidades de aparecer en las consultas realizadas en ese país que uno que sea .tv.
También es importante saber que los buscadores tienen en cuenta la coherencia entre el idioma del sitio, el de la petición realizada y el del navegador en su indexación, y por tanto la extensión puede influir en la tasa de clics.
Sin embargo, hay que relativizar esta regla general. Los robots de Google son lo suficientemente inteligentes como para entender la «nacionalidad» del sitio aunque la extensión no sea geográfica. Esto significa que un sitio .com escrito en español latinoamericano, con una dirección de contacto en México y con el peso mexicano como moneda, tendrá tantas posibilidades de aparecer en las consultas como un .mx.
Igualmente, aprovechar la extensión geográfica, potenciará tambien el seo local, cuestión mas que prioritaria si hablamos de tiendas o negocios con locales físicos.
La Fijación de Marca
Lejos quedaron los días en los que a Google le gustaban los dominios que solo contenían palabras claves (EMD). Hoy la realidad es muy diferente, a Google le encanta la marca y en base a ella y a su reputación, es que nos posiciona o nos quita de la primera página.
Recordemos que cuando hablamos de “marca” no solo se refiere a un nombre empresarial, puede ser perfectamente nuestro propio nombre. Todo dependerá de si somos proveedores de servicios, de información o de productos.
Volviendo al tema de la importancia que tiene la marca para el posicionamiento en Google, algo que lo confirma es que muchas de las inversiones en campañas seo de las agencias se basan en el posicionamiento de marca tanto o más que en el de palabras claves.
Por tanto, comprando un dominio que muestre y potencie nuestra marca, habremos ganado ya varias posiciones.
El nombre de la marca que representas optimiza el posicionamiento natural, cuando el usuario o potencial cliente busca tu sitio web.
Además de mostrar tu imagen de marca, la tasa de rebote (la tasa de visitantes que abandonan el sitio sin navegar por otras páginas) disminuye significativamente. Un nombre de dominio memorable refuerza la identidad de la marca. Causa impresión y atrae a Google, porque el sitio es fiable a los ojos de los usuarios.
La Simplicidad
Una dirección web debe ser sencilla para que tu grupo objetivo pueda recordarla fácilmente. Una dirección demasiado larga o compleja no hará que los usuarios quieran volver a tu sitio. También debe ser fácil de pronunciar y compartir. Además se recomienda que la dirección no tenga más de 15 caracteres y, por supuesto, que se evite a toda costa el uso de guiones.
Por ello, invierte tiempo en buscar bien antes de registrar tu nombre de dominio ideal.
RECUERDA: Un nombre de sitio corto, eficaz, creíble y adecuado anima a los usuarios a hacer clic en él. Es una palanca esencial para una indexación de calidad. Asociado a un contenido de alta calidad y a un sitio optimizado para la navegación, es amigable con el SEO y a Google le encanta.