La frecuencia de actualización de pantalla marca la diferencia en la experiencia de uso entre los usuarios más exigentes; hay ciertos datos que debes saber a la hora de comprar un portátil, en especial cuando vas a seleccionar el tipo de pantalla; si eres un jugador experimentado de videojuegos, sabrás de lo que estamos hablando, pero si no, no te preocupes, te mostraremos información especialmente relevante para que descubras la importancia de este elemento. En la competitividad, cada fotograma cuenta.
¿Qué es la frecuencia de actualización de pantalla y cuál es su importancia?
Es una especificación de la pantalla de cualquier portátil que hace referencia a la frecuencia mínima con la que un portátil actualiza la imagen de la pantalla, dependerá de la frecuencia y la actualización, son medidas en Hercios y milisegundos respectivamente. Es decir, la frecuencia de actualización de pantalla es responsable de la cantidad de fotogramas proyectadas en menor tiempo, para no perder detalle de ninguna escena, en los videojuegos, por ejemplo.
Las veces que una pantalla pueda proyectar una nueva imagen dependerá de esta frecuencia medida en hercios. Esto significa que si la frecuencia de actualización es de 144hz significa que la imagen puede ser actualizada 144 veces en un segundo; esto se combina con la adecuada funcionalidad del CPU y la cantidad de memoria RAM, además del rendimiento de la tarjeta gráfica; todos esos elementos trabajan en conjunto para dar la experiencia de visualización gaming más fluida.
A la hora de jugar videojuegos la nitidez y el tamaño de la pantalla no lo es todo; hay títulos tan minuciosos que con tan solo la pérdida de una imagen en un milisegundo puede acarralar la derrota en una partida; esto no sucederá si tu pantalla ofrece una buena cantidad de hercios; de esa forma el monitor se actualizará con mayor rapidez.
Características necesarias para aprovechar la frecuencia de actualización de pantalla
La frecuencia de actualización de pantalla no trabaja sola; será esencial que tu portátil cuente con estas características mínimas para que los procesos puedan ser completados adecuadamente.
- Pantalla con buena velocidad de actualización en fotogramas
- Procesador de última generación que permita una adecuada renderización de datos
- Al menos 16GB de memoria RAM para ejecutar instrucciones con rapidez
- Tarjeta gráfica que permita crear gráficos en pantalla a buena velocidad
Es muy importante tener en cuenta todas estas especificaciones, puesto que si la frecuencia de actualización de pantalla de tu portátil es de 144 Hz pero el procesador solo trabaja con 30 fotogramas por segundo, estarás desaprovechando la capacidad máxima que la pantalla ofrece. Este ejemplo es útil también si deseas añadir un monitor externo a tu laptop; es importante conocer el sistema de frames del portátil, pues de ello dependerá la cantidad de FPS que podrá exigirle a la frecuencia de actualización de pantalla.
Si modificas la configuración de gráficos, podrás influir en la calidad de la imagen; por ejemplo si disminuyes la resolución de la pantalla, la frecuencia de actualización de pantalla aumentará, pues le estarás exigiendo menor rendimiento al procesador y a la memoria RAM; estos tips podrían ser de ayuda si no puedes cambiar de portátil o añadir un monitor externo a tu escritorio.
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