Muy pocas personas saben de forma precisa los pasos y requerimientos para obtener el pasaporte o renovarlo. Y lo que suele suceder frecuentemente es que no reparamos en ello hasta que llega la hora de viajar, y nos damos cuenta que el documento está vencido o a punto de hacerlo. También puede ser que nunca lo hayamos hecho con anterioridad, o se encargaran nuestros padres.
Asi que lo mejor es que repasemos los requisitos y os demos unos consejos para que no os surjan imprevistos de última hora llegado el momento de gestionar o renovar el pasaporte mexicano.
Lo primero es pedir cita previa; para ello marcaremos en el teléfono 01 800 8010773, siempre en horario de oficina (08:00 a 20:00). Si deseamos modificar o re-programar la cita, también debemos emplear el mismo número, aunque en este caso habrá que llamar con 24 horas de antelación para modificarla con éxito.
En muchos sitios de Internet, incluido el gubernamental de la SER, no figuran varios de los requisitos; algunos tan vitales como el curp o llevar dos fotografías de tamaño apto para el pasaporte, aunque en algunos sitios pueden pedirnos hasta cuatro fotos.
Uno de los problemas que sufren la mayoría de viajeros es que no pueden determinar ciertamente lo que es una identificación oficial, debido a que para muchos, por ejemplo, una licencia puede valernos para el trámite. Sobre este requisito no existe consenso, ya que en varios sitios web figura que sí sirve como identificación y en otros no aparece.
Otro aspecto es discernir qué clase de pasaporte necesitamos, pues en este artículo abordamos el pasaporte dirigido a los viajeros eventuales, que es el pasaporte ordinario.
Consejos importantes para no tener problemas a la hora de pedir nuestro pasaporte:
– Debemos revisar la caducidad de nuestro pasaporte, ya que para muchas situaciones, como adquirir boletos de viaje, un requisito es que aún queden seis meses de vigencia del documento para efectuar el viaje. En este aspecto hay que poner especial atención.
– Comprobar nuestra credencial para votar del IFE, debido a que es la que nos sirve para identificarnos en la gestión del pasaporte. Aunque existen otros medios de identificación, suelen ser más complejos y hasta puede que no nos los acepten.
– Hay que llevar consigo cuatro fotos de formato pasaporte. Como puede que no nos acepten las fotos que no cumplan el tamaño y características oficiales, también debemos cerciorarnos que respetan los estándares. Nos puede pasar esto con las fotos de farmacia, así que mejor acudir a un fotógrafo de un centro especializado.
– En el momento de pedir cita, hay que facilitar a quien te atienda el correo electrónico y el CURP (Clave Única de Registro de Población), porque te lo pedirán. Lo mejor es imprimir tu curp para tenerlo a mano.
– A la hora de pedir la cita, también hay que tener cuidado con el sitio donde formalizaremos físicamente las gestiones. Si tenemos prisa o no reparamos en ello, puede que el lugar quede retirado o sea peligroso para nuestra seguridad, así que mejor investigar.
– Hay que abonar en el banco la cantidad requerida para más tarde llevar los resguardos originales y las copias. La cifra a pagar variará según los años de vigencia y las condiciones que necesitemos.
– Debemos hacer copias de todos los documentos que haya que presentar, al menos dos veces (IFE, ficha de pago y pasaporte). En el caso del pasaporte, debemos hacer fotocopias de las dos primeras páginas y de las dos últimas, que son las que reflejan la información principal.
– Si hemos cambiado de aspecto físico respecto al antiguo pasaporte, tenemos que llevar alguna clase de identificación oficial. Puede que hayamos sufrido un accidente o tenido un cambio radical, por eso debemos identificarnos corréctamente.
– En algunas situaciones puede que nos hayamos olvidado de pedir la cita previa. En este caso, debemos acudir a la dependencia central de nuestro estado para contarles nuestro caso y que nos puedan atender vía urgente. A veces funciona y otras veces no, dependiendo del personal que nos asista.
– Aunque la información que estamos dando es la actual a comienzos de 2018, debemos recordar que cada cierto tiempo las leyes van cambiando. De hecho la última vez que cambiaron los requisitos fue el 1 de octubre de 2015. Por ello debemos verificar si existen cambios en la documentación a aportar, o incluso comprobar que las dependencias no hayan cambiado de lugar.
– Ten en cuenta los periodos vacacionales, ya que pueden alargar bastante la fecha de la cita para que nos atiendan.
– Hay que tener paciencia cuando llamemos por teléfono, pues las lineas suelen saturarse ante la gran demanda recibida. Debemos marcar el teléfono las veces que haga falta y estar preparados para problemas técnicos que hagan parecer que nos hemos equivocado de número telefónico (aunque no sea así). Es necesarío persistir.
– Hay que tener en cuenta que no nos atienden sin cita previa, pues no tienen autorización para tramitar un pasaporte sin la misma.
Con todos estos consejos seguro que no tienes problemas para que la experiencia sea gratificante y puedas obtener el pasaporte lo más rápido posible.
Recuerda que la clave está en ti, siendo previsor e informándote de novedades y cambios. También que es bueno leer en Internet experiencias de otras personas, ya que se sacan testimonios muy valiosos para nuestro provecho.
