Vamos a resolver algunas dudas relacionadas con el coronavirus y el agua en todas sus variantes: potable, corriente o estancada.
¿Puede el coronavirus SARS-CoV-2 propagarse por el agua potable de manera que nos provoque COVID-19?
De momento, el virus SARS-CoV-2 causante de la enfermedad COVID-19 no ha sido detectado en ningún agua potable. Y es que los sistemas tradicionales de tratamiento de agua, los cuales la filtran y desinfectan, eliminan e inactivan el coronavirus.
Dichos mecanismos son los que se emplean en la mayoría de sistemas municipales de agua potable. Así que podemos estar tranquilos en este aspecto.
¿Es seguro emplear fuentes públicas para beber agua o hacer acopio de la misma?
Los suministros públicos de agua potable son seguros para beber. No obstante, las superficies alrededor de la fuente, que incluyen el extremo del caño o cualquier botón/accionador/palanca de la fuente, sí pueden suponer un riesgo de transmisión del coronavirus SARS-CoV-2 y otros gérmenes.
Debido a que el coronavirus SARS-CoV-2 suele durar unas 72 horas en superficies como el acero inoxidable, los caños y accionadores del chorro de las fuentes, sí pueden propagar el coronavirus SARS-CoV-2.
El Ministerio de Salud de Nueva Gales (NSW Health) recomienda que no coloquemos nuestra boca directamente en el caño de una fuente. Es mejor probar el flujo de agua y dejar que el agua corra durante unos segundos antes de beberla o hacer acopio de ella. Nunca debemos poner la boca o los labios en el caño de la fuente.
Si la fuente necesita que presionemos o accionemos cualquier botón o palanca, es mejor que limpiemos la superficie primero o usemos el codo como último recurso. Después, siempre debemos limpiarnos las manos con un desinfectante para manos a base de alcohol o simplemente con agua y jabón durante un minuto.
Mucho mejor que esto es emplear guantes desechables o cualquier elemento que nos ayude a no tocar ninguna superficie de la fuente. Luego esos guantes o elementos, los desecharemos en la basura con cuidado de no tocarlos por la parte en que la huella vírica haya entrado en contacto con el caño o botón de la fuente.
El Ministerio de Salud de Nueva Gales (NSW Health) recomienda que se lleven a cabo limpiezas más frecuentes de las fuentes durante estas pandemias.
¿Puede el coronavirus SARS-CoV-2 propagarse a través de piscinas y jacuzzis y causarnos COVID-19?
No existen pruebas ni hechos de que el coronavirus SARS-CoV-2 pueda propagarse a los humanos que hagan uso de piscinas o jacuzzis. El funcionamiento, mantenimiento y desinfección adecuados (por ejemplo, con cloro y bromo) de las piscinas y los jacuzzis es suficiente para eliminar o inactivar el coronavirus SARS-CoV-2 causante de la COVID-19.
¿Puede el coronavirus SARS-CoV-2 propagarse a través de los sistemas de alcantarillado?
Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) están revisando todos los datos sobre la transmisión del coronavirus SARS-CoV-2 a medida que se reuna la información.
En este momento, se cree que el riesgo de transmisión del coronavirus SARS-CoV-2 (que causa COVID-19) a través de los sistemas de alcantarillado es bajo. Aunque la transmisión del coronavirus SARS-CoV-2 a través de las aguas residuales podría ser posible, no existen pruebas hasta la fecha de que esto haya sucedido.
El SARS-CoV, un coronavirus similar al SARS-CoV-2, fue detectado en aguas residuales no tratadas durante un periodo que fue de los 2 a los 14 días. En el brote de SARS de 2002/2003, se documentó la transmisión asociada a las partículas en suspensión de aguas residuales.
Los registros sugieren que las prácticas habituales de cloración de los sistemas municipales de aguas residuales, son suficientes para inactivar los coronavirus, siempre y cuando los servicios públicos vigilen el nivel de cloro disponible durante el tratamiento para asegurarse de que no se haya agotado.
Los trabajadores de aguas residuales y alcantarillado deben emplear los protocolos estándar, tomar las precauciones básicas de higiene y usar el equipo de protección personal (EPP) prescrito para las tareas de trabajo actuales.
¿Deben los trabajadores de aguas residuales tomar precauciones adicionales para protegerse del coronavirus SARS-CoV-2?
Las operaciones de las plantas de tratamiento de aguas residuales deben garantizar que los trabajadores siguen prácticas adecuadas para evitar la exposición a las aguas residuales. Estas incluyen el uso de controles administrativos y de ingeniería, prácticas de trabajo seguras y el equipo de protección personal normalmente requerido para las tareas de trabajo cuando se manejan aguas residuales no tratadas.
No se recomiendan protecciones adicionales específicas contra la infección por SARS-CoV-2 para los empleados que participan en operaciones de gestión de aguas residuales, incluidas las de las instalaciones de tratamiento de aguas residuales.
¿Se encuentra el coronavirus SARS-CoV-2 en las heces?
El coronavirus SARS-CoV-2 causante de la enfermedad COVID-19, sí está presente en las heces de los pacientes diagnosticados con dicho cuadro vírico. Desconocemos la cantidad de coronavirus SARS-CoV-2 liberada por el cuerpo en las heces, el tiempo que dicho virus permanece en los excrementos y si el virus en las heces puede llegar a causar infecciones.
Actualmente no se conoce el riesgo de transmisión de COVID-19 a través de las heces de una persona infectada.
No obstante, se espera que el riesgo sea bajo si lo comparamos con los datos de brotes anteriores de coronavirus parecidos, como el síndrome respiratorio agudo severo (SARS) o el síndrome respiratorio de Oriente Medio (MERS).
Hasta la fecha no se ha informado de transmisión fecal-oral del coronavirus SARS-CoV-2.
Fuentes:
https://www.cdc.gov/coronavirus/2019-ncov/php/water.html
https://www.health.nsw.gov.au/Infectious/alerts/Pages/coronavirus-faqs.aspx