En Argentina se llama metegol, en Uruguay, futbolito, y en Chile, taca taca. El futbolín nació en 1940 en Barcelona para contentar a los niños mutilados del hospital de Montserrat y lo patentó Alejandro Finisterre.
Necesitaban un juego divertido y Finisterre pensó que lo mejor era inspirarse en el deporte rey. En realidad, adaptó algún juguete más rudimentario que ya existía en Europa.
A falta de espacio para jugar al fútbol de verdad, ideó uno en miniatura, al que dio forma un carpintero de Monistrol. Sesenta y cinco años después, convive con los videojuegos.
El futbolín está genial para desfogarse un rato!
Eso sí, lo del taca taca en Chile suena pelín diferente a echar una partida de futbolín ;)
Una gran idea la de Finisterre :)
Saludos.
Mira que me gusta jugar al futbolín!!! no se me da muy mal…bueno, regular…
Alejandro Finisterre fue el inventor, pero yo me lo paso bomba en el trabajo; organizamos partidas entre enfermos y personal… gran invento.
Es un juego que he practicado muchísimo.
Hasta gané un Campeonato de mi pueblo.
Pero allí, no hay reglas como en las demás ciudades.
Lo único que no se permite, es darle vueltas a las manivelas,
y mover el Futbolín.
¡Pero si vale!, por ejemplo:
-Cambiarsela de muñeco, y tirar.
-Arrastrarla.
-Tirar pegado a la banda.
Vamos, casi todo lo que se prohíbe aquí, y en los campeonatos.
creo que solo he jugado un par de veces en mi vida jejej pero es curioso saber los origenes
un saludo