El sistema nervioso de un animal recoge y procesa la información, actuando según ella. El sistema nervioso sensorial toma la información de los órganos de los sentidos del animal y la envía al sistema nervioso central (en los seres humanos, el cerebro y la médula espinal), donde es procesada.
Una vez determinada una respuesta adecuada a la situación medioambiental, son emitidas otras señales a través del sistema nervioso autónomo (que controla las acciones involuntarias como los latidos del corazón) y el sistema nervioso somático (que controla las acciones voluntarias como mover un miembro).
Las señales en los nervios son diferentes de las corrientes eléctricas ordinarias. Las señales viajan a través del sistema nervioso a lo largo de los nervios, que son redes de células individuales llamadas neuronas.
Cada nervio puede transportar muchas señales al mismo tiempo, de un modo parecido a como un cable telefónico puede llevar muchas conversaciones independientes. Los puntos de comunicación entre los extremos de las neuronas individuales se llaman sinapsis, y las partes largas y delgadas de una célula nerviosa que transportan realmente la señal (los “cables”) se llaman axones.
En los sistemas electrónicos como una minicadena de música, las señales son transportadas a lo largo de los cables mediante el movimiento de iones de potasio y sodio a través de la membrana externa del axón.
Cuando una señal llega a un extremo de una neurona, los productos químicos llamados neurotransmisores son lanzados y recogidos por la siguiente neurona, y la señal prosigue su camino.
Un tiempo de respuesta típico de una neurona es un milisegundo (0,001 segundos), que es más de mil veces más lento que el tiempo de respuesta del componente equivalente en nuestros ordenadores.
El sistema nervioso de los animales superiores se halla concentrado. Entre los animales como las medusas, el sistema nervioso se halla disperso por todo el cuerpo, más o menos como un sistema de raíces.
En formas superiores, tanto los órganos de los sentidos como las partes que procesan la información de los sentidos actuando de acuerdo con ellas, se hallan en la cabeza. A veces, como en los gusanos, este sistema central de procesado es tan sólo un manojo de nervios (que reciben el nombre de ganglio). En los vertebrados, sin embargo, se convierte en la compleja estructura que conocemos como cerebro.
Las diferentes partes del cerebro humano efectúan diferentes funciones. Podemos dividir el cerebro (de forma general) en tres secciones:
– El cerebro posterior o rombencéfalo se halla localizado en la base, donde arranca la médula espinal. Controla cosas como los movimientos motores automáticos; cuando nos movemos inconscientemente para recuperar el equilibrio, por ejemplo, las señales neurales proceden de esta parte del cerebro.
– El cerebro exterior (la “materia gris”) es la corteza cerebral, y es ahí donde son procesados los datos de los sentidos y donde se localizan las funciones superiores como el razonamiento y la memoria.
– El cerebro medio se halla entre las dos partes anteriores, de donde proceden las emociones y algunos comportamientos.
Hasta ahora, los científicos no han podido comprender totalmente la complejidad del cerebro. Existe por ejemplo, una tendencia en la divulgación científica de asociar identificaciones fáciles de las tres partes del cerebro:
Posterior – reptil, existencia inconsciente
Medio – emociones animales
Corteza – funciones superiores
O podemos encontrarnos con la identificación:
Posterior – id
Medio – ego
Corteza – superego
Pero esto no es así de simple, ya que desentrañar las complejidades del cerebro humano es muy probable que mantenga a la humanidad y los científicos ocupados durante mucho tiempo, y las ideas supersimplificadas como éstas, ya no son aceptadas por los investigadores.
Además de las señales que viajan a lo largo de los nervios, los animales controlan sus funciones corporales mediante el uso de hormonas. Esas moléculas son segregadas por glándulas o tejidos especializados y luego recorren todo el cuerpo y afectan a otros órganos.
En los seres humanos, esas glándulas constituyen el sistema endocrino. Por ejemplo, cuando nos asustamos, las glándulas de los riñones segregan adrenalina, la cual hace que el corazón aumente su ritmo e incrementa el flujo de la sangre en los músculos.
Muy curioso el sistema nervioso de las medusas. Excelente artículo. ;-)