El terremoto (y posterior tsunami) producido el 11 de marzo de 2011, denominado de manera oficial por la Agencia Meteorológica de Japón como el terremoto de la costa Pacífico de la región de Tōhoku de 2011 (東北地方太平洋沖地震, Tōhoku Chihō Taiheiyō-oki Jishin), ha sido un seísmo de magnitud 8,9 MW que generó olas de maremoto o tsunamis de hasta 10 metros de altitud.
El terremoto ocurrió a las 14:46:23 hora local (05:46:23 UTC) del pasado viernes. El epicentro del seísmo se situó en el mar, frente a la costa de Honshu, a unos 130 kilómetros al este de Sendai, en la prefectura de Miyagi. Al principio se creyó que el sismo tuvo una magnitud de 7,9 grados MW, pero posteriormente fue aumentada a 8,8 y finalmente a 8,9 grados por el Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS).
El seísmo tuvo una duración aproximada de dos minutos según dijeron los especialistas. El Servicio Geológico de los Estados Unidos (USGS) explicó que el terremoto sucedió a causa de un desplazamiento en las cercanías de la zona de la interfase entre la placa de subducción Pacífica y la Norteamericana.
En la latitud que sobrevino este terremoto, la placa del Pacífico de mueve en dirección oeste con respecto a la placa Norteamericana a una velocidad de 83 milímetros por año. La placa del Pacífico se introduce debajo del país nipón en la fosa de Japón, y se hunde en dirección oeste debajo de Asia.
Dos días antes, este seísmo había sido precedido por otro importante terremoto, aunque de menor magnitud, que se produjo el miércoles 9 de marzo de 2011 a las 02:45:18 UTC, en la misma zona de la costa oriental de Honshū, Japón. Esta vez tuvo una magnitud de 7,2 grados en la escala de Richter, con una profundidad de 14,1 kilómetros. Ese mismo día las autoridades de la Agencia Meteorológica de Japón alertaron sobre la posibilidad de un maremoto, pero sólo a nivel local para la costa japonesa.
La magnitud de 8,9 MW lo convirtieron en el terremoto más potente que haya sufrido Japón hasta la fecha, así como el quinto más potente del mundo de todos los terremotos que se han podido medir hasta la actualidad. Desde 1973, la zona de subducción de la fosa de Japón ha sufrido 9 movimientos sísmicos de magnitud 7 ó superior. El mayor fue un terremoto que se produjo en diciembre de 1994, de una magnitud de 7,8, con epicentro a unos 260 kilómetros al norte del terremoto ocurrido hace unos días (el 11 de marzo del 2011), el cual causó 3 muertos y unos 300 heridos.
A continuación algunas imágenes en alta calidad sobre los efectos del devastador terremoto, se puede pinchar en cada una de ellas para verla mejor.
Casas arrastradas por las olas del tsunami en Natori, prefectura de Miyagi, después del fuerte terremoto producido en la costa noreste de Japón. Un incendio se generó en las viviendas a pesar de estar rodeadas de agua.
El tsunami ocasionado por el fuerte terremoto se abrió camino por el aeropuerto de Sendai al noreste de Japón el viernes 11 de marzo de 2011. El terremoto de magnitud 8,9 atacó violentamente la costa este provocando un tsunami de olas de hasta 10 metros que se llevaron por delante barcos, coches, edificios y toneladas de escombros tierra adentro.
Otra imagen del aeropuerto de Sendai, mientras el feroz tsunami anega el terreno.
Evacuados permanecen en el Parque Central de Shinjuku de Tokyo, Japón, el 11 de marzo de 2011. Los temblores generados por el terremoto de escala 8,9 causaron numerosos daños e incendios en la mayor parte de la costa noreste japonesa. El aviso de tsunami se emitió para todo el Océano Pacífico.
Esta es la visión tras el tsunami: avionetas, coches y escombros agolpados.
El tsunami engulle una zona residencial de la ciudad de Natori, al noreste de Japón.
Reporteros de la Agencia de Prensa Asociada de Tokio se refugian debajo de unas mesas mientras sufren un temblor.
La gente se cobija mientras el techo de una librería se cae en Sendai, la zona más afectada de Japón.
El tsunami forma un remolino cerca del puerto de Oarai, en la prefectura de Ibaraki.
Los sismólogos de la Oficina de Estudios Geológicos Británicos (Edimburgo, Escocia), posan para los medios de comunicación mientras enseñan en un monitor los gráficos de actividad sísmica producida por el terremoto en Japón.
Un mapa realizado por la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA), muestra la intensidad del tsunami causada por el terremoto de magnitud 8,9 ocurrido en Japón el 11 de marzo de 2011. El Centro Estadounidense de Alertas de Tsunamis del Pacífico avisó del peligro a todos los países del Pacífico. En Hawái no se produjeron victimas.
Este mapa batimétrico preparado por la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA), muestra la topografía del fondo oceánico y los rasgos físicos del Pacífico noroeste en base a una rejilla ETOPO1. Se puede apreciar cómo el archipiélago japonés se eleva del fondo del océano de una manera mucho más abrupta que las costas de otros países asiáticos. Las islas y elevaciones que están diseminadas por el océano y son visibles en la imagen, afectan en la forma en que el tsunami viaja, así como su velocidad. En océano abierto, los tsunamis pueden viajar a velocidades de hasta 800 km/h. Esto causa que sean tan destructivos cuando llegan a las costas.
Casas en llamas cerca del aeropuerto de Sendai, en la prefectura de Miyagi.
Un hombre con casco pasa entre los escombros cerca de la casas incendiadas en la ciudad de Iwaki, en la prefectura de Fukushima.
Grandes explosiones se sucedieron en la refinería de petróleo en Ichihara, prefectura de Chiba.
Un tsunami se acerca a las costas de Natori, en la prefectura de Miyagi, al noreste de Japón.
El tsunami provocado por el terremoto, el más fuerte en Japón desde hace 140 años, se adentra a lo largo de la ciudad de Iwanuma, prefectura de Miyagi.
El tsunami arrastra barcos de pesca y vehículos a su paso por el puerto de Onahama en la ciudad de Iwaki, prefectura de Fukushima.
Las olas del tsunami se adentran en la ciudad de Kesennuma, en la prefectura de Miyagi, norte de Japón, llevándose todo a su paso.
El primer ministro de Japón, Naoto Kan, reacciona al sentir los temblores del terremoto mientras se encuentra en una reunión del parlamento de Tokio.
El propietario de una tienda de cerámicas en Tokio comprueba los daños tras el seísmo.
Muchos edificios mostraban las ventanas rotas tras el terremoto.
Personal de rescate trabajando en el distrito financiero de Tokio tras recibir las primeras notificaciones de heridos.
Una vista aérea de la ciudad de Hitachinaka, prefectura de Ibaraki, muestra el desastre ocasionado por el tsunami a unos vehículos que estaban preparados para ser transportados.
En esta vista aérea podemos ver cómo las olas del tsunami se adentran en el rio Naka, en la ciudad de Hitachinaka, prefectura de Ibaraki.
Casas, coches y escombros son arrastrados por las olas del tsunami en Kesennuma, prefectura de Miyagi, al norte de Japón.
Varias casas ardiendo en medio del desastre que ha provocado el tsunami en las cercanías del aeropuerto de Sendai.
Varias personas que trabajan lejos de sus lugares de residencia se abrigan con mantas para evitar el frío en el parque de Yokohama, Tokio.
Una mujer consulta un mapa para encontrar una ruta mientras descansa en el recibidor de un hotel de Tokyo, ya que los servicios de metro y tren fueron suspendidos tras el terremoto.
Personas evacuadas esperan en un refugio de Tokio tras el seísmo.
Un hombre busca entre los pocos alimentos que quedan en una tienda de Tokyo. La mayoría de los productos fueron vendidos rápidamente debido a que mucha gente no pudo volver a casa el día del terremoto.
Empleadas de un hotel de Tokio se refugian temerosas ante las numerosas réplicas que se produjeron tras el fuerte seísmo.
Miles de personas quedaron atrapadas en Tokio sin poder volver a sus lugares de residencia. En esta imagen vemos a los viajeros esperando mientras observan atentamente las noticias televisivas.
Vecinos de la ciudad de Sukagawa, en la prefectura de Fukushima, comprueban los daños ocasionados por el terremoto en una casa y su carretera adyacente.
Un trabajador de la estación de tren de Shinagawa en Tokyo, da instrucciones a los pasajeros tras el terremoto.
Policías colocan pilotos señalizadores a lo largo de la autopista de Honolulu, en Hawái. Tras el terremoto, se esperaba un gran tsunami a lo largo de todo el Pacífico. La población costera de Hawái fue evacuada como medida de prevención.
La familia Faletoi se refugia en el aparcamiento del Parque Manoa en Oahu, Hawai, que se convierte en un centro de la Cruz Roja ante los avisos de tsunamis.
Estudiantes de la ciudad india de Ahmedabad, rezan por las víctimas del terremoto en Japón mientras sostienen unas velas.
La acera de una calle peatonal en la ciudad de Urayasu, prefectura de Chiba, quedó destrozada por la presión del terremoto.
Un hombre está sentado envuelto con una manta tras haber sido evacuado en el distrito financiero de Tokyo.
Las olas del tsunami sumergieron la ciudad de Natori, prefectura de Miyagi.
Varios vehículos quedaron sepultados por un muro en un aparcamiento de la ciudad de Mito, prefectura de Ibaraki.
Los vecinos de Iwaki, en la prefectura de Fukushima, caminan entre los escombros de sus casas destrozadas.
Esta imagen proporcionada por la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA), muestra los modelos de recorrido creados por el Centro de Investigación de Tsunamis del Laboratorio de Medio Ambiente Marino del Pacífico NOAA (PMEL), pudiendo verse la altitud estimada de las olas en su paso por la cuenca del Pacífico. Las olas de mayor tamaño se esperaban cerca del epicentro en Japón. Las olas decrecerán en altitud según vayan viajando por el océano, pero volverán a ganar altura según se aproximen a zonas costeras. Generalmente, mientras la energía de una ola decrece con la distancia, la altitud de las costas cercanas también será menor.
Varios edificios sufren incendios en la ciudad de Yamada, en la prefectura de Iwate, después de producirse el terremoto.
Varios trabajadores inspeccionan una carretera comarcal en Satte, prefectura de Saitama, como resultado del fuerte seísmo que sufrió.
Demasiado… Esperemos que la tierra se calme por unos 200 años….
Es una pena T.T nos creemos los dueños de todo y luego el mundo te recuerda que estamos de paso y que somos más fragiles de lo que pensamos T.T una gran pena :(
que tristeza ver todo lo q les sucedio q no diera uno por poder ayudar pero desgraciadamente no c puede & mas fuerte el miedo q inunda al no saber lo q puede suceder despues con nosotros qien no tiene miedo es por q no tiene conciencia ni corazonn UNA GRAN PENA q dios los vendiga ):
pues solamente podemos pedirle a dios que nos de un tiempo mas de vida y que pues que los ayude a ellos y que nos cubra y q nos cuide a nosotros…
xq la vdd es mui feo lo q les esta pasando y la vdd si ves las imagenes si te dan ganas de llorar… pero ps llorando no resolveremos naa a si q bueno ahi q cuidarnos y no olvides VIVE LA VIDA COMO SI FUERA TU ULTIMO DIA DE VIDA DEMUESTRALES A LOS DEMAS LO MUCHO Q LOS KIERES Y LO IMPORTANTE Q SON PARA TI…
los kiero mucho y cuidense mucho…