Pink ofreció un show en París el 18 de Diciembre pasado, en el que mostró un video en alianza con PETA (People for the Ethical Treatment of Animals) que denuncia el maltrato y la explotación de que son objeto las ovejas en Australia.
El controvertido vídeo muestra imágenes gráficas y explicitas, en las que se aprecia el maltrato y la mutilación de las ovejas en los criaderos australianos, al momento que Pink narra lo que ya de por si es gráfico.
Al cerrar filas en la campaña con PETA, Pink pidió a sus fans que dejen de comprar lana a Australia y otros países que maltratan de esa manera a las ovejas. Al mismo tiempo invitó a sus fans a ver bien las etiquetas de la ropa de lana que piensen comprar o tomen otros tejidos como alternativas.
“Si es lana de merino o hecha en Australia, dejen la ropa en los percheros, no la compren”, concluyó Pink.
“París es la capital mundial de la moda y deseo lanzar mi campaña aquí. Es importante tomar consciencia de lo que sufren las ovejas en Australia. Este país produce una gran cantidad de lana y utiliza para ello métodos crueles”, declaró Pink, quien quiere que “un máximo de países boicoteen la lana australiana”.
La estrella internacional también ha denunciado las condiciones de transporte de ovinos hacia Oriente Próximo y el Maghreb.
Este vídeo contiene escenas bastante fuertes:
El negocio de la lana
Muchas de las razas de ovejas (como la Merino) han sido producidas por selección artificial, por lo que muchas de ellas mueren de calor en el verano por el exceso de lana, pero al ser trasquiladas mueren en el invierno de frío.
En el Perú, el trasquilamiento no solo de las ovejas sino también de los camélidos andinos como la alpaca, se hace bajo condiciones en las que no les importa el sufrimiento del animal sino la producción que rinda. Así, es frecuente que el trasquilamiento cause muchas heridas en estos animales, que no son atendidos por personal veterinario.
Australia produce el 50% de la lana usada en todo el mundo, explotando a más de 100 millones de ovejas. Evidentemente, el trato humanitario hacia estos animales no es una prioridad para la industria. Y si bien, la crianza se realiza en tierras muy lejanas, no estamos al margen del problema ya que la lana de estas ovejas llega hasta todo el mundo por diversas marcas. Es realmente difícil probar la procedencia de la lana, por lo que mucha de la lana que llega hasta nosotros es australiana.
El mulesing
Las ovejas criadas en Australia son principalmente merinos, criadas específicamente para producir gran cantidad de lana.
Entre los pliegues de su lanuda piel se depositan parásitos e insectos que ponen huevecillos y pueden devorar viva a la oveja. Para prevenir este ataque, los granjeros australianos practican una cruel operación llamada “mulesing”.
El “mulesing” consiste en colocar a las ovejas boca arriba y atar sus patas entre barras de metal para –sin anestesia ni analgésicos– cortar trozos de carne del tamaño de un plato, alrededor de su cola con el fin de conseguir posteriormente una cicatriz lisa en la que no puedan depositarse los parásitos. Esto deja una herida sangrante y dolorosa alrededor de su cola, sin embargo, las heridas a veces se infectan y las pulgas atacan de cualquier manera.
Existen métodos humanitarios y sofisticados de controlar las parasitosis
El nuevo medicamento para aliviar el dolor que causa esta práctica cuesta unos 30 céntimos por oveja, y puede ser administrada por los propios granjeros. Hugh Wirth, presidente de la RSPCA (Roya Society for the Prevention of Cruelty to Animals) afirma que sólo aquellos granjeros cualificados y con experiencia suficiente deberían ser autorizados a hacerlo.
Tras el acuerdo alcanzado entre los productores de lana australianos y PeTA (People for an Etical Treatment of Animals), la práctica del mulesing será eliminada en el año 2010. La Australian Wool Innovation está estudiando alternativas al mulesing para que estén listas antes de esta fecha límite.
El portavoz de la Asociación Australiana de Productores de Lana, Martín Oppenheimer, declaró: “Dado que, de momento, no existe alternativa al mulesing, la introducción del Tri-Solfen significa que podemos llevando a cabo este vital procedimiento y satisfacer a los consumidores internacionales y a la comunidad…
Además de aliviar el dolor, este analgésico promueve la cicatrización, mejorando la movilidad, y permitiéndonos producir lana de una forma ética.” Oppneheimer olvida que la infestación de parásitos es producto del extremo confinamiento. Muchas de las razas de ovejas (como la Merino) han sido producidas por selección artificial, por lo que muchas de ellas mueren de calor en verano por el exceso de lana, pero al ser trasquiladas, mueren en invierno de frío. Esto poco tiene que ver con un trato ético a los animales.
Los colores unidos de Benetton se están volviendo de color rojo sangre
Cuando las ovejas dejan de ser productivas, se las envía a Oriente Medio en condiciones de viaje deplorables, hacinadas en barcos y a merced de condiciones climatológicas adversas. Muchas ovejas heridas o enfermas son tratadas como si fueran objetos, se las lanza por la borda o se las amontona mientras agonizan. Muchas de las que logran sobrevivir a este inhumano viaje, son degolladas mientras aún están conscientes. La mortalidad a bordo es de un 10% y suelen viajar sin apenas agua y comida. Unas mueren aplastadas contra los excrementos, ya que las ovejas tratan de alcanzar la poca agua que se les da.
Después de haber solicitado repetidamente al gobierno australiano el cese de estas atrocidades, desde la sede de PETA en Estados Unidos se lanzó una campaña de boicot internacional que ha tenido apoyo por parte de empresas tan importantes como Abercrombie & Fitch en Estados Unidos, George y New Look en Reino Unido, o por parte de personalidades como Martina Navratilova o Maneka Gandhi.
“Los colores unidos de Benetton se están volviendo de color rojo sangre” declara el coordinador de la Campaña en Europa, Andrew Butler. “Si Benetton quiere limpiarse las manos de la sangre de millones de ovejas, debe oponerse a vender prendas elaboradas con lana australiana.”
PETA y Animanaturalis-Libera! hacen un llamamiento a los consumidores para que boicoteen a Benetton hasta que cese de vender lana de Australia y están bombardeando a Benetton con anuncios y protestas en todo el mundo para que se sepa el apoyo de la compañía a la crueldad.
Más información en PETA, Save The Sheep, United Cruelty of Bennetton, Animanaturalis y Asociación Animalista Libera!, Altarriba
Hay ke tener mas conciencia!
pobres animalitos…