Si pensamos en “grasa y aceites”, tendremos una buena imagen de la tercera clase importante de moléculas de la vida: los lípidos. Los lípidos más simples están formados a partir de carbono, hidrógeno y oxígeno (aunque no con las relaciones halladas en los carbohidratos).
Algunos lípidos sirven como membranas celulares, otros como medios de almacenaje de la energía, y otros aún realizan una gran variedad de funciones biológicas.
Técnicamente, un lípido es cualquier material que puede ser extraído fácilmente de los sistemas vivos y que es insoluble en el agua. Esta amplia definición explica por qué moléculas tan dispares entran en esta clasificación.
Los lípidos son muy eficientes en el almacenaje de la energía, ya que almacenan casi el doble de la energía que los carbohidratos de igual peso. Por ello todos los animales (y algunas plantas) los utilizan con esta finalidad.
Cuando no nos cuidamos y aumentamos demasiado de peso, todas las posibilidades son de que el peso represente energía alimentaria que nuestro cuerpo está almacenando como grasa, reteniéndola hasta que la necesite.
Algunas plantas utilizan los lípidos para almacenar energía (el aceite de oliva es un ejemplo de un lípido vegetal), pero la mayoría utilizan carbohidratos. Esto se debe probablemente a que las plantas no se mueven, y en consecuencia el peso extra no impone una mayor carga a su metabolismo.
Los lípidos comprenden un paquete sorpresa de moléculas. El colesterol, la testosterona y estrógeno (las hormonas sexuales masculina y femenina en los seres humanos), la vitamina D y la cortisona son todas lípidos.
Nunca me acostaré sin aprender algo con tu blog jeje
saludos
PUTO TRUCHO LESBIANO
me caes como el culo hermano
no me gustan los nenes, soi varon me llamo mulán