Madrid es una ciudad que representa lo mejor de España, una urbe dinámica y pletórica de vida en la que podemos realizar miles de actividades mientras disfrutamos de su ambiente. En esta capital hay cabida para el relax o el frenesí, y debido a su multiculturalidad, es una ciudad abierta al mundo pero a la vez con identidad propia. Por ello, es elegida como destino turístico por miles de personas cada año, y una de las mejores experiencias que se puede realizar, es explorar su centro urbano a pie.
Existen numerosos emplazamientos que podemos visitar, como la Puerta del Sol, el centro de la ciudad y kilómetro cero de España donde encontraremos la famosa estatua del Oso y el Madroño; el Retiro, el parque más importante de la urbe, donde está el famoso Palacio de Cristal; la Gran Vía, una avenida llena de vida y bullicio que nos lleva hasta Plaza España; la Puerta de Alcalá, todo un símbolo de la ciudad; la Plaza Mayor, una de la más antiguas de España donde encontramos tiendas con un encanto tradicional; la Plaza de Cibeles, otro lugar representativo de Madrid donde el equipo del Real Madrid y la Selección Española acuden a celebrar sus triunfos; o el Palacio Real, donde vive la Familia Real y podemos visitar unos jardines impresionantes.
Siguiendo con los numerosos lugares imprescindibles, se puede visitar Moncloa, el barrio donde podemos divisar toda Madrid desde un mirador; la Catedral de la Almudena, la construcción religiosa más importante, donde la Familia Real es coronada y celebran sus enlaces nupciales; el Templo de Debod, un precioso complejo con estanques y obras de estilo egipcio, ya que de hecho fue un regalo de Egipto a España por haber cooperado en la salvación de los santuarios de ese país; la Casa de Campo, el pulmón de Madrid, donde encontramos el parque de atracciones de la ciudad; o el Rastro, un mercado exterior que se celebra los domingos en el barrio de la Latina, en el centro de la capital.
Al ser la ciudad más grande de España y su capital, es un centro neurálgico para los negocios internacionales. Pero no debemos olvidar que también lo es para la cultura. Hay multitud de actividades culturales por realizar y puede ser difícil escoger qué lugares visitar. Aparte de sus impresionantes colecciones estables en el Museo del Prado, Museo Reina Sofía o el Thyssen Bornemisza, existen cuantiosos museos alternativos (Museo de Arte Contemporáneo), centros culturales (Centro Cultural Conde Duque), galerías (Sorolla), teatros (Albéniz, Maravillas, Príncipe, La Latina, Comedias de Alcalá), cines, salas de conciertos (Casa de Ópera Teatro Real, la más importante de España), locales de flamenco (El Corral de la Morería, Torres Bermejas, Café de Chinitas, El corral de la Pacheca) o festivales, de los que sería casi imposible realizar un recuento.
Para muestra un botón, en este vídeo podemos sentir la emoción de ver una obra pictórica emblemática y conocida en todo el mundo, algo que es sólo posible si visitamos Madrid y sus muy recomendables museos. No existe comparación en ver las pinturas en persona, aunque las hayamos visto miles de veces antes en libros o Internet, la sensación es sobrecogedora, como por ejemplo, con las Pinturas Negras de Velazquez (algo en lo que coincide la mayoría de personas).
Otra de las vertientes importantes de Madrid es su vida nocturna, más palpable que otras ciudades europeas, debido a la extensión de su horario. Cuando otras ciudades duermen, Madrid vive de noche. Existen numerosos pubs, discotecas y salas de fiesta donde podremos disfrutar de la marcha, la juerga y la complicidad nocturna. En Madrid se cena a las 10 de la noche, y si regresas a casa antes de las 4 de la madrugada, no podrás decir que has salido de noche, sino que simplemente fuiste a dar una vuelta.
La gente de Madrid tiene predisposición por la vida social, le encanta salir a la calle para divertirse con alegría y recibe con los brazos abiertos a sus visitantes, lo que conforma una metrópoli vibrante y distinta a la de otras ciudades europeas. En Madrid confluyen modernidad y tradición, siendo muy famoso su barrio de Chueca, el barrio gay por excelencia que celebra la Fiesta del Orgullo, o el de Malasaña, si buscamos un ambiente más castizo. También es una excelente idea vivir esta ciudad en alguna de sus conocidas celebraciones, como las Fiestas de San isidro, la Verbena de La Paloma, la Verbena de San Antonio de la Florida, las Fiestas del Carmen, las fiestas de San Cayetano y San Lorenzo, la Verbena Castiza de fusión o las Fiestas de la Melonera.
Gastronómicamente en Madrid también hay mucho que disfrutar, pues son reconocidas sus características gallinejas, el cocido madrileño, los callos madrileños, el potaje de garbanzos, la sopa de ajo, la tortilla de patatas, el besugo y el bacalao a la madrileña o los bocadillos de calamares de la Plaza Mayor. En cuanto a dulces, son conocidos los barquillos, las rosquillas de San Isidro, las planchas de hojaldre, los bartolillos, las torrijas o los roscones de Reyes (Corona de la Almudena). Aparte que un desayuno que podemos realizar a partir de la madrugada, son los churros con chocolate que sirven en la churrería de San Ginés, en la Plaza Mayor.