Emprender la organización de una boda no es algo que se pueda tomar a la ligera, ya que existen factores como el estrés, los imprevistos o la falta de presupuesto, que dificultan el proceso.
Por ello, y para que no terminemos celebrando el enlace descontentos, vamos a hacer un pequeño repaso a varios pasos o consejos a tener en cuenta para organizar una boda correctamente. Si queréis más información para no cometer errores de planificación, os recomiendo echar un vistazo al portal OrganizaTuEvento.net, donde hallaréis más ideas para una mejor organización de vuestra boda.
Anunciar el compromiso
Debemos informar a los familiares y amigos que hemos decidido casarnos. Una vez que hemos avisado, todos comenzarán a prepararse por su cuenta y eso les permitirá tener más tiempo para una mejor organización.
Elegir una temática y ambientación para el enlace
Habrá que pensar si queremos que la boda sea de día o de noche; en el campo o en un ambiente más urbano; si vamos a decantarnos por algo grande o bien algo más íntimo y familiar… Son algunos ejemplos del estilo que podemos darle a nuestra boda y a los que debemos prestar atención.
Si definimos el horario, esto afectará al presupuesto, ya que cuantas más horas dediquemos, más caro nos saldrá el evento. Si por ejemplo, destinamos las primeras horas de la mañana a la boda, podemos realizar una especie de brindis matutino con brunch, siendo una opción más económica que si nos vamos a unos horarios más tardíos o nocturnos, o salimos fuera de la ciudad.
Existen otros detalles que debemos tener en cuenta, como las flores o la música, ya sea para el lugar de la boda, el convite u otros sitios donde se desarrolle la celebración más tarde. También hay que pensar respecto al tema musical, si vamos a realizar un baile, etc…
Tener en cuenta los números y ser prácticos a la hora de confeccionar la lista de invitados
Un buen consejo en cuanto a la lista de presentes, es realizar cuatro de ellas: una nuestra, otra de nuestro/a novio/a, otra de nuestros padres y otra de nuestros suegros. Luego se conjuntan y se empieza a hacer limpieza; con ello se consigue comprobar que puede haber muchas personas que no conocemos o no son tan cercanas a nosotros.
Y es que si nos hacemos con una lista de 500 invitados, el evento va a ser una vorágine de saludos y fotos. Una buena idea es pensar en las personas que queremos ver asistiendo a nuestro cumpleaños, pues con ello conseguimos ver que son menos personas de las que invitaríamos a la boda. A veces no hay que preocuparse si los familiares lejanos se pueden molestar, ya que precisamente para eso son lejanos.
Viéndolo desde otra perspectiva, si queremos cumplir con esos familiares lejanos, simplemente debemos ser conscientes de ello y de la carga que supondrá, de la cual tendremos que responsabilizarnos sin arrepentimientos.
Elegir la iglesia, juzgado o sitio para casarse
Si queremos casarnos tanto por lo civil como por la iglesia, debemos reservar con mucha antelación este paso. Y es que los papeleos es de las primeras cosas que debemos gestionar para poder elegir con comodidad la fecha en el sitio que deseemos. Como hay mucha demanda, más vale reservar cuanto antes. Habrá que planear si queremos realizar alguna clase de protocolo, lectura o votos, para tener la liturgia preparada.
Determinar la ayuda que vamos a recibir
Ya que dos cabezas piensan mejor que una, o siempre es recomendable tener varios puntos de vista de cualquier tema, es recomendable obtener ayuda ajena en los preparativos del enlace. Podemos delegar un poco de apoyo en nuestros padres o suegros, familiares, o bien pedir ayuda a un organizador de bodas.
Incluso hay sitios web como el de Bodas.net donde encontraremos ideas y ayuda de proveedores o empresas externas, ampliando y mejorando los detalles de los preparativos hasta niveles profesionales. Lo primordial es que nos sintamos a gusto con la/s persona/s que nos ayude/n a organizar el evento y esa ayuda signifique una mejora en el resultado final de los diferentes elementos: banquetes, decoración, actividades…
Confeccionar las invitaciones y enviarlas
Este paso es una tradición, ya que es una forma de anunciar e invitar formalmente a las personas que queramos que asistan a nuestra boda. Tendremos que idear el diseño o confiar en expertos que nos muestren plantillas y estilos que nos gusten o identifiquen para que las preparen. Podemos aprovechar la invitación para comunicar visualmente a la gente la clase de enlace que vamos a celebrar, o incluso los códigos de vestuario.
Elegir o encargar el vestido y traje
Cuanto antes nos pongamos con este paso, mucho mejor. Y es que con antelación, podremos acercarnos más a la idea que tengamos en cuanto a vestuario y quedaremos más contentos con el resultado final. Las prisas solo traen consigo el tener que quedarnos con un vestido algo peor de lo que hubiéramos deseado. Y si buscamos con antelación, también puede suponer una ventaja económica, ya que encontraremos opciones más baratas.
Y por supuesto, aunque tener tiempo por delante hasta el enlace nos puede permitir hacer una dieta estricta para caber en dos tallas menos de traje, también debemos ser realistas y no preveer que seremos sílfides. En cuanto al vestido o traje, aparte del estilo visual acorde a nuestros gustos, debemos pensar en su comodidad.
Posteriormente hay que escoger el resto del ajuar de acorde al diseño del vestido, como zapatos, tocado/velo, pendientes y demás complementos, tanto de la novia, como el novio (gemelos, corbata, pajarita…)
Las alianzas
No debemos olvidarnos de escoger y comprar las alianzas para el momento clave de la boda en que nos daremos el «Sí quiero».
Decidir la clase de tarta que se servirá
Podemos escoger la tarta tradicional de varios pisos o bien montarlo en plan alternativo con cupcakes y otras clases de pasteles vistosos, divertidos o refinados.
Reservar el sitio del banquete
Habrá que pensar qué clase de banquete deseamos celebrar, ya que puede ser más sencillo o más pomposo. Si no estamos seguros de cómo organizar este paso, mejor delegar en un planificador de eventos cualificado, ya que podremos descansar mentalmente sobre el convite para dedicarnos a otros aspectos de la boda. Si nos decidimos a responsabilizarnos del banquete, habrá que buscar un salón y decidir el menú o catering. También se puede reservar un restaurante, donde tendremos música, servicio de cocina y camareros.
Escoger un fotógrafo
Aunque ahora todo el mundo tiene móviles y uno puede pensar que no va a faltar material multimedia de nuestro enlace, no podemos estar más equivocados. Primero, porque los asistentes suelen estar menos atentos de lo que deberían en realizar las fotografías, y segundo, porque luego no suelen preocuparse de pasarte las fotos a ti o demás personas.
La calidad también es un factor importante, porque por mucha resolución que tengan los móviles, no pueden nunca competir con los juegos de lentes de las cámaras profesionales. Por eso si queremos tener un buen recuerdo de nuestra boda, no está de más contratar un buen fotógrafo; así dispondremos de recuerdos multimedia como un buen reportaje de fotos de buen gusto e incluso vídeos de calidad.
Reservar la luna de miel
Es importante pensar en la clase de escapada que haremos tras el enlace. Por eso es bueno decidirlo con tiempo, ya que por regla general, podremos encontrar mejores ofertas si las reservamos con meses de antelación. También será buena idea realizar una lista con las cosas que debemos llevar, para que no se olvide nada.
Organizar la despedida de soltero/a
Otro paso en el periplo hacia nuestro enlace, es realizar una despedida de soltero/a como dios manda, siendo una forma divertida de decir adiós a nuestra soltería. Para ello podemos confiar en una agencia de despedidas de soltero/a como Omnia Deluxe, ya que nos informarán de nuevas tendencias para que sea un evento original y nos aconsejarán la mejor forma de celebrarlo. De esta manera, es otra responsabilidad que nos podemos quitar para centrarnos en lo importante, como es la organización de otros elementos de la boda.
Hacer una prueba de maquillaje, peinado y vestuario
Unas semanas antes del enlace, es aconsejable realizar alguna prueba de vestuario para comprobar si la ropa necesita algún arreglo o si incluso necesitamos adquirir algún complemento. Lo mismo ocurre con el peinado o el maquillaje. Hacer un simulacro del look de nuestra boda será estupendo para solventar errores o perfeccionar detalles.
Relajarse y disfrutar
Es importante que los últimos días previos a la boda, lo tengamos todo tan claro y preparado, que podamos descansar o relajarnos como es debido. Es bueno dedicarse un día de spa y terminar los tratamientos de belleza adecuados para lucir radiantes el día señalado.